Carta a los obreros de Parras

A ustedes, a los más esforzados trabajadores de Parras, en especial a los que diariamente viajan a Saltillo, Ramos Arizpe y Derramadero, en un derroche de salud física y mental, por vigilia y desvelo, por el gran riesgo de percance carretero, por el desgaste anímico, corporal y espiritual, a ustedes que sufren este rigor es a quienes va dirigida esta carta que hace constar lo siguiente:

Que el principal culpable de que ustedes tengan que vivir esta diaria pesadilla se llama Evaristo Madero Marcos, el peor cacique que ha tenido Parras de la Fuente desde los tiempos de Máximo Campos Navarro, aquel sátrapa que apoyó a los invasores franceses, un cacique que a pesar de su gran traición jamás se atrevió a cerrar los telares de Parras, un atentado que Evaristo consumó siendo Alcalde por el PVEM, apoyando una huelga inútil y mezquina que devastó a La Estrella, una fuente de empleo cerca de todos sus hogares.

Que gracias a Evaristo ustedes tienen que dejar su casa, su esposa y sus hijos antes del alba, expuestos a los riesgos de su ausencia, porque ya no regresarán hasta muy entrada la noche, la negra noche de una pesadilla que se repetirá día tras día, sin saber ustedes hasta cuándo seguirán así, tal vez cuando abra sus puertas la fábrica textil, que no será posible con el “Coco” y mucho menos con Evaristo, si es que llega de nueva cuenta al poder.

Que la salud de los obreros que tienen que viajar a otros municipios se va dañando progresivamente, sin contar el gran riesgo que corren diariamente en carretera, todo esto culpa de Evaristo y el PVEM, cuyos Gobiernos no han podido gestionar empleos en Parras, sino todo lo contrario, han cerrado empresas y han abierto antros de vicio, negocio de los corruptos en la Presidencia Municipal.

Que por culpa de Evaristo, ustedes, que dejan sus hogares largas horas del día y de la noche, es que reciben la calumnia vil de gente cobarde que ha esparcido la insidia de que su casa es visitada en su ausencia por el “sancho”, una mentira que siembra en ustedes la duda y la discordia familiar, ponzoña que ha derramado Evaristo en hogares ajenos, ave de mal agüero, que nunca vaticina bien alguno, sino todo lo contario, un árbol cuya sombra envenena.

Que mientras ustedes viven a diario una larga odisea para ir a laborar, con los impuestos que pagan, Evaristo ha mantenido a todos sus familiares, lambiscones, queridas y suripantas que lo complacen y adulan, para luego pensionarlos sin tener ningún derecho, asunto que otros candidatos han prometido investigar y castigar. Verifiquen ustedes su planilla, la cual ha llenado con sus familiares.

Que el gran dilema de ustedes, trabajadores casi migrantes, es que su destino está en un grave conflicto entre la libertad y la esclavitud. Porque antes del trabajo forzado que ahora tienen eran personas libres, hasta que un mal Gobierno, el de Evaristo Madero Marcos, colaboró en destruir el patrimonio industrial y laboral de La Estrella. Por eso ustedes son presos de esa necesidad de salir a trabajar lejos de Parras, asunto que debe motivarlos a volver a conquistar su libertad votando por una opción diferente a la del PVEM, recuerden que los principales empresarios que pueden invertir en Parras, no abrirán empresas mientras analfabetas como el “Coco” o Evaristo se mantengan en el poder. No olviden nunca, amigos trabajadores, que el hombre al volverse libre siempre podrá cambiar el curso de la historia. Vale.