Agenda política (10)

Gracias por atender estas letras señor lector. Siempre le agradeceré que usted me lea. Variados y hartos comentarios me han llegado con esta saga de textos titulados “Agenda política”. Pues sí, la agenda política está saturada y a todos enfada, pero con esto hay que vivir y claro, defendernos de ese gobierno ya en la ataraxia en la gobernanza, pero el cual sólo piensa en el poder, en “su poder”, los de Morena. Y los de Morena (no un partido político, menos con idolología propia, sino simplemente una institución como puente para lograr fines aviesos y personales) reducidos a un caudillo y jefe, Andrés Manuel López Obrador.

Estamos a días de las nuevas elecciones cruciales para el futuro del país. Siempre serán cruciales y siempre serán históricas. Conviértase usted en un actor y protagonista y no en un mero espectador de palo y argamasa. No señor lector, los humanos estamos hechos de linfa, tendones, huesos, inteligencia, cerebro, corazón y sal. Por eso Jesucristo dijo aquello: hay que convertirnos en sal, el sabor y sazón de la tierra. No sea usted de cartón/piedra, no; sea usted un actor valiente y este 6 de junio vaya y emita su voto libremente. ¿Es contra Morena y AMLO y todo lo que huele a podredumbre, corrupción y dictadura? Usted y nadie más lo va a decidir. ¿Es a favor de un continuismo de AMLO perpetuado en el poder a través de sus claques los cuales no tienen ideas ni voz propia? Sólo usted lo va a decidir en la soledad del cubículo emitiendo su valioso voto.

“El valor de un espíritu, se mide por soportar la verdad”, aforismo lapidario del gran Frederick Nietzsche. Y usted más que nadie lo sabe: AMLO no quiere saber nada de verdades las cuales estallan como granadas de fragmentación en sus ojos. Nada. Es él y su “verdad”, sus “otros datos”, por eso su necedad y tozudez no tienen límites. Las leyes en México fueron creadas, como en cualquier parte del mundo, para respetarse. AMLO las viola sistemáticamente desde que llegó al cargo. El desencanto de la ciudadanía es brutal. Aun con veda electoral, él siguió machacando a los opositores.

El gran, gran filósofo y una de mis fuentes esenciales en lecturas, a donde voy abrevar eternamente, José Ortega y Gasset, afirma con claridad que hay dos dominios en el hombre: o bien las ideas, o bien las creencias. ¿AMLO tiene ideas? Absolutamente no. Tiene creencias. Cree en milagros, en suerte, en azar, en afiches: trae amuletos en su cartera, billetes de dos dólares; él, precisamente él que critica ciegamente a los “neoliberales”; no es cuestión de traer “rosarios benditos” en el retrovisor del auto de medio millón de pesos, no. Eso es palabrería huera. No, nada de eso señor lector. Es cuestión de saber gobernar, es cuestión de tener ideas y luego, ponerlas en práctica. Las creencias viven en capas muy adentro del humano, nos alerta Ortega y Gasset, por eso es casi imposible erradicarlas (aquello chabacano de “abrazos y no balazos”). Por eso las creencias ciegas le ganan a las ideas.

ESQUINA-BAJAN

Punto uno: a días de las elecciones, los propios candidatos con ideas, saben de la dimensión política que se está jugando. Dos declinaciones fuertes que hablan de la próxima derrota de Morena en las urnas, como se lo he venido advirtiendo en esta “Agenda política”. En Sonora, Ricardo Bours de Movimiento Ciudadano, abdicó de sus intenciones y se sumó al liderazgo y candidatura de Ernesto Gándara del PRI. Y el PRI y Gándara van en contra de uno de los hijos predilectos de AMLO, Alfonso Durazo.

Punto dos: de igual manera, en Tlaxcala, Liliana Becerril del Partido Encuentro Social, se pasó al lado de Anabell Avalos, candidata del PRI/PAN y PRD. Estado otrora bello y pacífico, Tlaxcala, como todo el centro de México, se encuentra en poder de los poderosos carteles de la droga, a los cuales AMLO les declaró “abrazos y no balazos”, los resultados en materia delicada como la seguridad (inseguridad, pues), están a la vista.

Punto tres: ¿Usted cree en la vacuna contra el COVID-19? Mejor dicho, ¿usted cree en las diferentes vacunas? Pues póngasela. Así de sencillo. Hace días y como siempre, los de Morena, los del gobierno federal y el empleado de AMLO en la entidad, Reyes Flores Hurtado, hicieron un verdadero caos con la aplicación de la vacuna. Los “Vividores de la Nación” de AMLO son una nulidad. Las filas kilométricas y en el vivo sol, para ponerse la vacuna, desataron la ira y el enojo de miles de saltillenses. Los módulos fueron rebasados y nadie, nadie se responsabilizó del gobierno federal por semejante incapacidad.

Punto cuatro: ¿usted se siente seguro y listo al recibir una vacuna? ¿Cuál de ellas? ¿La Sputnik V, la Sinovac, la AstraZeneca, la Moderna, la Pfizer, la Cansino? O de plano, para que el resultado sea más eficaz ¿usted se va a poner una dosis de una y otra dosis de otra? ¿Usted es de los que se va a poner un coctel explosivo? Pues caray, lo admiro y respeto. Lo bien cierto es lo siguiente: no sabemos contar muertos en México. Aunque se lo platiqué en anterior texto, hoy salen a la luz pública nuevos datos del horror y del engaño en el cual nos tiene AMLO y sui gobierno.

De acuerdo con el informe de “Exceso de Mortalidad en México” de la Secretaría de Salud, en muertes por COVID en menores de 20 años en México, son al menos 160 por ciento más que las confirmadas. Un drama, una tragedia. Los jóvenes también mueren. El gobierno federal acostumbró y enseñó que morir en casa, es mejor. Por eso los hospitales ya están solos.  

LETRAS MINÚSCULAS

La dictadura de AMLO está desembocando en una sola cosa: el monólogo, el soliloquio. Es decir, un signo de esquizofrenia.