Cierre a toda velocidad en carrera atlética
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La llamada ‘más humilde de Saltillo… la más difícil del año’ reunió a los atletas que buscaron cerrar el 2018 de la mejor manera
Durante el año se realizan un sinfín de competencias callejeras, donde atletas elite y aficionados acuden regularmente, sin embargo en estas fechas para muchos existe una muy especial y que sirve para cerrar corriendo una temporada más en su historial.
Atletas, runners y público en general, se dan cita en el populoso sector de la colonia Alfredo V. Bonfil, para unirse a esta festividad, que representa la Carrera Atlética Navideña.
En el calendario de estos practicantes y promotores del atletismo callejero, se encuentra la tradicional justa presentada por el Club Deportivo Gatos, la cual en su trigésimo cuarto aniversario se efectuó en tiempo y forma, con una buena asistencia.
Entre senderos repletos de polvo, piedras y matorrales, así como partes pavimentadas, la prueba considerada del rubro Extremo, tuvo su centro de atención en dicho asentamiento, para recorrer algunas calles de la colonia Valle de las Flores Popular, Mirador y ascender por el emblemático Cerro del Pueblo.
Calificada como “la más humilde de Saltillo… la más difícil del año”, el evento logró superar las expectativas, al presentar el comité organizador una favorable reunión en la cual los atletas aprovecharon la ocasión para tratar de realizar su mejor marca personal.
Sin lugar a dudas fue una estupenda prueba, considerada por los asistentes la mejor manera de cerrar el año, donde los más veloces e intrépidos atletas durante la competencia, resultaron ser Rolando Figueroa y Claudia Miriam Castillo.
Figueroa, representante del Club Lobos, detuvo los cronómetros en 17 minutos y 18 segundos, mientras que la internacional Miriam Castillo, del equipo Martin Team, registró 22’40”.
La carrera otorgó premios especiales a ganadores de las “metas volantes”, ahí Castillo se llevó las dos en tanto que Figueroa y Sergio Flores, con una cada atleta.
Al final del acontecimiento, los organizadores encabezados por Maximino Ibarra y su familia, entregaron los premios en disputa, para cerrar con la tradicional lluvia de dulces.
