Con histórico récord de Dani Alves, el PSG es campeón de la Copa de la Liga
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Gracias a Cavani y Mbappé, el cuadro parisino hace al lateral brasileño el jugador con más títulos de la historia
Dos goles del uruguayo Edison Cavani, de penalti en el minuto 8 y en el 85; y otro del argentino Angel Di Maria, en el 22, le dieron el triunfo y el segundo título de la temporada, después de la SuperCopa, al PSG, frente al Mónaco, inferior durante los noventa minutos en la Copa de la Liga.
Pero este título no sólo significó uno más para las vitrinas del cuadro parisino, sino el número 36 para el lateral Dani Alves, quien se convirtió en el jugador con más campeonatos conseguidos en la historia.
El equipo parisino, aún sin el brasileño Neymar, lesionado de gravedad antes del partido de vuelta de los octavos de final de la Champions frente al Real Madrid, comienza a olvidar con el título el fracaso europeo, que, sin embargo, marcará el curso de la entidad.
El Mónaco, muy lejos del PSG en la lucha por la Liga, cedió pronto en el encuentro.
En el minuto 4 una gran jugada de Mbappé terminó con un derribo del delantero por parte de Glik. El árbitro consultó al VAR si la entrada había sido dentro o fuera del área y finalmente señaló penalti. Cavani lo transformó en el 1-0, en el octavo minuto.
El PSG no sufría, esperaba en su terreno la oportunidad de asestar otro golpe. En el minuto 22 lo consiguió. Una contra letal concluyó con un pase de Mbappé a Di María, que se plantó solo delante de Subasic, para batirle en el mano a mano (2-0).
En el minuto 36, el árbitro, otra vez después de consultar al VAR, anuló un tanto de Falcao por fuera de juego, y el primer tiempo concluyó con el 2-0.
El propio Cavani, al recoger un balón en el área y mandarlo a la red de Subasic, junto al poste, redondeó el triunfo de su equipo con el 3-0, en el minuto 85.
Y si bien esta copa no levanta una eliminación desastrosa de la Champions League, el PSG puede jactarse de ser amplio dominador en Francia y, sobre todo, Dani Alves tiene una
“arruga” benigna más, para una sonrisa que nunca termina.
