Consulta de Mexicali jala votos aunque se friegue la economía
COMPARTIR
TEMAS
¿Qué necesidad tiene el gobierno de la 4T de meterse en más broncas que las que ya tiene en materia económica, seguridad y ahora críticamente en salud pública?
Digo esto porque la cancelación de la cervecera Constellation Brands por vía de la amañada “consulta popular” en Mexicali, tiene al País al borde del primer conflicto hecho y derecho del nuevo T-MEC, toda vez que la familia Sands -dueña de la mayoría de las acciones de esa empresa- y sus principales inversionistas, dieron luz verde a sus abogados, para iniciar lo que técnicamente se conoce como “caso inversionista-Estado” en el marco del acuerdo comercial entre ambos países.
Les platico: Como resultado de mi artículo de ayer “Cancelación de cervecera en Mexicali es acta de defunción a confianza de la IP”, representantes de dicha empresa me contactaron para exponer los pormenores de un análisis que fue encomendado a una consultora internacional.
El problema para la 4T viene en serio, porque Constellation Brands está dispuesta a interponer un amparo en contra de los resultados de la consulta popular, porque “los éstos deterioran aún más el clima de negocios del País, al constituir un caso más en que el gobierno federal lleva a cabo acciones que violan el orden jurídico o son de dudosa legalidad”.
Atendiendo esos “resultados”, Diana Álvarez, Sub Secretaria de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos de la SEGOB, anunció que la Conagua no otorgará los permisos para que esa planta opere y añadió que instancias del gobierno se pondrán en contacto con los inversionistas para determinar cómo se resarcirán los daños.
Apelando al sistema judicial mexicano, se viene un amparo contra la obligatoriedad de cualquier decisión que el gobierno pueda tomar contra los intereses de la cervecera, basada en los resultados de dicha consulta.
Y en el tema internacional, las opciones que contempla el T-MEC habilitan a la empresa a considerar la existencia de un caso “inversionista-Estado, donde Constellation demande a la 4T en un tribunal por algunas de las causales contempladas en el acuerdo trilateral, como son: expropiación indirecta, trato nacional, discriminación, nivel mínimo de trato, entre otras.
En este caso, la empresa podría considerar las disciplinas originales del TLCAN, que resultan más claras para el inversionista, e incluso las del nuevo T-MEC.
Una demanda contra el gobierno mexicano puede considerar no solo el monto invertido hasta ahora -$910 millones de dólares- sino también otras pérdidas colaterales que la cancelación provoca a Constellation.
Por ejemplo, la pérdida del 10% que sufrieron las acciones de la empresa a raíz del anuncio, que por sí solas representan cientos de millones de dólares más.
Mi fuente de información me dijo que la empresa definirá las acciones y los tiempos que emprenderán, tan pronto alguien del gobierno federal se comunique con ellos y les ofrezca alternativas para resarcir los daños, como podrían ser: cancelar el resultado de la consulta popular, ofrecerles otro lugar para llevar a cabo este proyecto, reembolsarles los gastos y las pérdidas registrados, o cualquier otra ocurrencia de la 4T.
ANTECEDENTE
En enero de 2016, la firma estadounidense Constellation Brands -dueña en EUA de las cervezas de la marca del Grupo Modelo- anunció la instalación de una planta en el Ejido El Choropo -en las goteras de Mexicali- con un costo de $1,400 millones de dólares, para atender la demanda de California, su principal mercado en el vecino país.
El plan era concluir la planta en máximo cinco años y al momento de la consulta, la empresa contaba con todos los permisos y requerimientos necesarios. La construcción llevaba un avance del 70% con un presupuesto ejercido de $910 millones de dólares.
La consulta ordenada por MALO se llevó a cabo a pesar de existir dos amparos en su contra. El primero fue promovido por la Agrupación “Artículo 39 ProBC” y el segundo fue obtenido debido a que la consulta se realizaría contra las recomendaciones sanitarias de distanciamiento social promovidas por el propio gobierno federal.
Pese a todo eso, en su conferencia matutina del lunes, MALO confirmó que se respetarán los resultados de la consulta, con lo cual se confirman tres tendencias preocupantes para el ambiente de negocios en México:
1.- El gobierno federal sigue reforzando la práctica de llevar a cabo acciones que violan el orden jurídico vigente o que son de dudosa legalidad. En el primer año de gobierno de MALO crecieron un 263% la presentación de acciones de inconstitucionalidad ante la SCJF. Las controversias constitucionales aumentaron un 222% en el 2019, respecto al primer año del sexenio anterior.
A juicio de la empresa, esto crea incertidumbre jurídica para las inversiones nacionales y extranjeras y pone en serias dudas el Estado de Derecho, pues transmite la percepción de que cumplir con las leyes, ya no es suficiente.
2.- Daña la imagen del gobierno de México en el mundo, lo cual frena la atracción de inversiones extranjeras hacia el País. Los resultados de la mentada consulta fueron difundidos por medios internacionales como WSJ, NASDAQ, Financial Post, Financial Times, Reuters, donde se destaca que no es la primera vez que la 4T somete a consulta pública una inversión en infraestructura y “esto es una mala señal para potenciales inversionistas”.
3.- Daña la interlocución entre el gobierno y los empresarios. La consulta minimiza los espacios de negociación entre ambos sectores, lo cual seguramente afectará las decisiones de negocio de las empresas que operan en México.
Como tétrico colofón de todo esto, la cancelación de la planta cervecera ampliará las perspectivas negativas que ya enfrenta la economía mexicana, agudizada por la caída en los precios del petróleo y la inestabilidad económica provocada por la pandemia del COVID-19.
Antes de la consulta popular de Mexicali, las estimaciones del PIB para México en 2020 eran:
Goldman Sachs: -1.6%
Citibanamex: -2.6%
Credit Suisse: -4.0%
Bank of America y Bancomer: -4.5%
Scotiabank: -5.7%
CAJÓN DE SASTRE
“La única ´explicación´ a éste desmadre provocado por su terquedad en hacer la mentada consulta popular, es que MALO prefiere ganar desde ahora votos con miras al 2021 y al 2024, aunque con ello se lleve entre los pies la salud de la economía y por ende, de los mexicanos”, dice la irreverente de mi Gaby, y mi bisabuelo el mudo la secunda con un enérgico movimiento de su cabeza.
placido.garza@gmail.com