Crónicas policiacas reloaded (1)

En esta tierra no aprendemos de plano, fuimos hipnotizados, sojuzgados, vilipendiados y continua la zozobra, recuerdo el texto de William Reich, en “Pequeño Hombrecito”: “Qué derecho tienes para darme lecciones? Puedo ver esta pregunta en tu mirada temerosa. La oigo de tu arrogante boca, Pequeño Hombrecito. Tienes miedo de mirarte, tienes miedo de la crítica, Pequeño Hombrecito, lo mismo que tienes miedo de la potencia que se te promete. No sabrías utilizarla. No puedes imaginarte que un día podrías sentirte de distinta forma: libre y no acobardado, sincero y no traicionero; que puedes amar en pleno día y no clandestinamente como un ladrón en la noche. Tú mismo te desprecias, Pequeño Hombrecito. Dices: ¿Quién soy yo para tener una opinión personal, para decidir mi vida, para decir que el mundo me pertenece? Tienes razón: ¿Quién eres tú para reclamar tu propia vida?” .Y para muestra los siguientes botones:

CRÓNICA PRIMERA.- Envalentonado por los últimos suspiros de la “Chema Nostra” que da sus pataditas de ahogado, su bajeza el secretario de Finanzas, Blasito Flores, anuncia la firma de reestructuración de la deuda eterna de la mafia moreiriana (todo entre pandillas) ante bancos que obtendrán jugosas ganancias con los intereses para amortizar, a mínimo 30 años, el endeudamiento del patrimonio coahuilense, generado en el despilfarro y los destinos oscuros del erario por parte de la pandilla que gobernó de 2005 a 2017.¿Y sigue?

En resumen, la deuda es la misma que hace 8 años, es decir, 36 mil millones de pesos, de los que se han pagado 20 mil millones, pero de puros intereses y como no ha bajado ni un centavo, pues a seguir pagando para que los patrones no se vean apurados. Todo lo anterior, ante la complacencia de la “oposición” coahuilteca. Urge una investigación de la deuda y sus tripitas, y no sólo un valiente sino un bragado. ¡Auxilio, Peje!

CRONICA SEGUNDA.- La SEDU sigue siendo el refugio de los maleantes y poco favor se hace a la buena voluntad de su titular por parte de funcionarios del pasado que siguen con el atropello de los derechos fundamentales del magisterio, con conductas sombrías y vicios inimaginables.

Desde el área jurídica se gesta un plan de complacencias con el atraco, ahora a través de las cuotas de la sociedad de padres de familia, por parte de los directores de escuelas que con el cuento de la falta de recursos dan destino distinto y sin comprobación.

Lo anterior no sólo con el visto bueno del director jurídico de la Secretaría de Educación, el “Licenciado” Enrique Flores, sino también con el de la exprimera dama del poder judicial que despacha en el mismo antro de fechorías. Ya este par se vio apurado en el pasado al tener que suspender la operación mochila por la serie de abusos que se cometían con los niños, pero dicen que Flores se jacta de que es inamovible, ya que de él fue la ocurrencia de poner candados a las escuelas en las elecciones de junio de 2017 y que Riquelme se la debe.

CRÓNICA TERCERA.- Definida la suerte de la viuda del notario de Monclovita la bella, queda también cerrado el círculo que apuntaba a los guaruras de un exfuncionario gordo y fachoso, que hoy es diputado federal, como autores del homicidio.

Diversas triquiñuelas y enjuagues con terrenos y otras propiedades adjudicadas a la “Familia Nostra”, dicen ser la verdadera causa de ese asesinato durante la dictadura pasada.

¿Cuántas propiedades existen adjudicadas bajo partidas imposibles de rastrear a nombre de la “Familia Nostra”?, ¿Cuántos fedatarios se prestaron a la especie? Basta rascarle poquito y verán que supura el veneno.

CRÓNICA CUARTA.- Publicitado con el objetivo de “eficientar” la gestión pública mediante la innovación y la mejora continua de procesos, además de optimizar el uso y aprovechamiento de tecnologías de la información, la Secretaría de Fiscalización de Tessy Guajardo firmó un convenio con el Tribunal de Justicia Administrativa de Coahuila de la magistrada Sandra Rodríguez Wong.

Con ese convenio que también incluye al “fiscal de hojalata” de la corrupción, se cierra la pinza a fin de mantener la información de las investigaciones sobre los atracos moreiranos a 50 candados y 70 claves. Se están preparando para borrar toda huella de podredumbre de la que formaron parte. Vaya cosa.