¡Demasiado pronto, Edith!

‘Encarnó a la perfección el arquetipo de la protagonista de telenovelas: belleza clásica, actitud conservadora, libre de escándalos, suficientemente lejana para ser adorada pero convenientemente amable para ser popular’

1.- Nadie esperaba que una mujer tan hermosa, joven, llena de vida y con una actitud tan positiva, falleciera de pronto. Es cierto que todos sabíamos que Edith González estaba librando una batalla contra el cáncer desde 2016, pero suponíamos que era una situación bastante controlada. Las entrevistas que ofreció en las que derrochaba sus ganas de vivir al máximo y el hecho de que jamás perdiera su belleza clásica, nos despistó a todos.

2.- Por eso, el pasado jueves 13 de junio cuando se viralizó la noticia de su fallecimiento, el público mostró primero incredulidad y después gran pesar. Algo que llamó poderosamente mi atención, fue el tono en que el público en general se expresaba de la desaparecida actriz. Como si la hubieran conocido en persona o hubieran llevado una relación cercana con ella. En estos tiempos de críticas ácidas contra cualquier celebridad, este detalle resultó muy elocuente.

3.- Tengo mi propia teoría al respecto. Las personas muestran cariño y respeto por Edith González porque fue una estrella de otros tiempos. Con una trayectoria de más de cuatro décadas, encarnó a la perfección el arquetipo de la protagonista de telenovelas: belleza clásica, actitud conservadora, libre de escándalos, suficientemente lejana para ser adorada pero convenientemente amable para ser popular.

4.- Este tipo de estrellato muere con Edith González porque vivimos en una época en la que la irrelevancia de la telenovela es más notoria que nunca. A muy pocas personas interesan las telenovelas que actualmente están al aire, los grandes públicos no saben los nombres de esas producciones ni conocen a sus protagonistas. Ahora se consumen series en las que aparecen personajes controversiales, violentos, sexualmente activos y muy intensos.

5.- La dulzura de los primeros personajes de Edith González le dieron una inmensa popularidad y para cuando empezó a hacer personajes antagónicos o rebeldes, estos de todos modos terminaban siendo elegantes, sofisticados o ejemplares de alguna manera. Su versión de Aventurera era tan fresa que las personas terminaban justificando plenamente que su personaje se dedicara a la prostitución. Y cuando ella tuvo desencuentros con Carmen Salinas, todos le dieron la razón a Edith: “Es que la naca de Carmelita es más del tipo de Niurka”, decían.

6.- La primera telenovela en la que Edith González alcanzó fama internacional fue Los ricos también lloran; allí encarnaba a la hija adoptiva del personaje de Verónica Castro y su verdadera madre era interpretada por Christian Bach. Y ahora en 2019 ¡Edith murió tres meses y medio después que Christian! En aquel lejano 1979, Christian Bach iba llegando de su natal Argentina, mientras que Edith ya tenía un poco más de tiempo de haber salido de Monterrey para establecerse en la Ciudad de México. Ambas hicieron una gran amistad.

7.- Hace algunos años, tuve a Edith González en un programa de entrevistas que estaba a mi cargo. Hermosa y amable, contestaba con entusiasmo todas mis preguntas y aderezaba sus respuestas con anécdotas y comentarios divertidos. Sabía vender muy bien su imagen de protagonista. Es muy triste saber que su trayectoria ha quedado trunca y que pudo haber dado mucho más. Sin embargo nos queda el consuelo de su recuerdo: perfectamente hermosa para siempre. Tal como ocurrió con Marilyn Monroe y la princesa Diana de Gales.

Toda opinión es muy valiosa.

Búsquenme en Twitter, Instagram, Facebook y Snapchat en: @felixrivera333