El futuro de tu empresa

A partir de los años 90, el concepto de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) empezó a tomar auge. El mundo corporativo comenzó a voltear a ver a la sociedad más allá de la idea de relación patrón-empleado, incorporando también al medio ambiente y la sostenibilidad en los procesos.

Pero detengámonos un segundo para pensar hasta dónde llega la influencia de este tipo de acciones cuando están bien planeadas conforme a las necesidades, talentos e intereses de la comunidad.

Cuando una empresa decide emprender acciones de corte social hacia su área de influencia inmediata (colonias alrededor), no sólo afecta positivamente a las personas que habitan en esas zonas, sino también a sus empleados en el clima organizacional, la identidad de la empresa y sentirse parte de algo más grande. Es decir, contribuir de forma específica a un mundo mejor para nuestros hijos.

Estas acciones tienen réplica más allá de lo que genera una intervención. En el corto y mediano plazo, las niñas, los niños, adolescentes y jóvenes involucrados serán el día de mañana tus empleados, tus proveedores y/o tus clientes. Es decir, si hoy nos preocupamos por formar mejores ciudadanos mañana tendremos menos corrupción (robo hormiga, el moche que piden para algún permiso); empresas más eficientes (proveedor que entrega tarde o mal) y mayores utilidades (cliente que prefiere más barato aunque contamine o tenga malas prácticas sociales la empresa). En resumen, mejores ciudadanos generan empresas más eficientes y lucrativas.

Esta es una invitación al sector privado, en especial, a hacer una reflexión en cómo ejercer los presupuestos destinados a RSE en este nuevo año, no sólo se trata de hacer regalos y eventos para la foto. Se trata de invertir en el desarrollo de nuestra sociedad y por ende, en el futuro de tu empresa.

En otras palabras, no importa si eres una micro, pequeña, mediana o representas un corporativo de una empresa multinacional o internacional en México; todos somos Ciudadanos de Tiempo Completo y podemos (sobretodo debemos) hacer la diferencia todos los días en nuestros entornos.