El insoportable deseo de discriminar
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¿Quién tiene más valor? Un obrero de FEMSA o un integrante del consejo de administración de TELEVISA
Yo discrimino, yo he sido discriminado. Tú discriminas, tú en algún punto de tu vida has sido discriminado. El que este libre de pecado, que tire la primera piedra. Ya sea por instinto, como arco reflejo, por prejuicio, por ineptitud mental, por pequeñez, todos hemos estado en esas dos posiciones en cierto momento.
De acuerdo al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación se define como “una práctica cotidiana que consiste en dar un trato desfavorable o de desprecio inmerecido a determinada persona o grupo, que a veces no percibimos, pero que en algún momento la hemos causado o recibido”.
Estados Unidos se encuentra sorprendido y ofendido debido al asesinato de George Floyd quien fue sometido por la policía de Minneapolis. A pesar de la pandemia del coronavirus, que sugeriría a algunos optar por tender la mano o simplemente por querer un mundo solidario, parece ser que no ha tenido ese efecto.
La sociedad yankee que duerme con el enemigo sigue sufriendo con la discriminación. Hoy fue hacía los afroamericanos; pero otro día será a los latinos o tal vez la furia podrida será dirigida hacía una persona con gustos distintos a los “normales”. Lo cierto es que el propio presidente es quien fomenta tendenciosamente y de manera consciente este tipo de actitudes, le encanta generar encono en la sociedad. “Soy su presidente de la ley y el orden” así dijo este lunes pasado al dirigirse a la nación. Convencido de desplegar el ejército en caso de que esta crisis social no sea resuelta a tiempo. El odio genera más odio.
La Convención para la Eliminación de todas las formas de Discriminación Racial celebrada por las Naciones Unidas en 1963, define a la discriminación racial como “toda distinción, exclusión, restricción, o preferencia basada en motivos de raza, color, linaje u origen nacional o étnico que tenga por objeto o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio, en condiciones de igualdad de los derechos y libertades”.
Resulta alarmante e imperdonable este tipo de condiciones que se viven en una sociedad. ¿Cómo debe de ser la podredumbre de una persona, de una sociedad para que se actúe así? Considero que la descomposición social de los Estados Unidos es uno de sus tantos males que los llevan al camino del fin. Dudo que ese país tenga solución, esta demasiado descompuesto. Cómo enmendar algo que tiene tantos parches.
Dice la filosofía popular “casa del herrero, cuchillito de palo”. Hoy he visto a la sociedad mexicana, a muchos saltillenses en lo particular _reduciendo el espectro_ sumarse a las protestas desde la comodidad de su teléfono inteligente vía redes sociales con el hashtag #blackouttuesday. La sociedad liquida nos deja desprovistos de valores y nos pone en la mente, de manera muy sutil, necesidades tan absurdas como el creer que conmiserarse vía redes sociales, va lograr un cambio.
Definitivamente vivimos en dos Méxicos diametralmente opuestos. Mientras AMLO iniciaba una gira de trabajo, claxonazos de automovilistas y motociclistas de la clase media, clase media alta y alta, originarios de fraccionamientos residenciales exclusivos; en la ciudad de México y en las capitales y ciudades importantes de al menos 20 estados se realizaron caravanas convocadas por el Frente Nacional AntiAmlo (Frena) en la cual participan empresarios, sociedad y activistas de derecha como Pedro Luis Martín Bringas, (de cepa lagunera) Pedro Ferriz y Rafael Loret de Mola por mencionar solo a algunos de los escurridizos que evitaron ser identificados en las paradas constantes.
En las capitales estatales, la mayoría de las protestas no fueron de gran impacto, salvo la excepción de Monterrey. De una manera un tanto infantil y escondidos en una retórica desgastada, se dicen estar en contra del comunismo y de que México llegue a la situación de Venezuela. Hay que saber que muchos de los integrantes de Frena comulgan o coquetean con grupos de extrema derecha como el opus dei, el yunque y por supuesto a la Coparmex quien se ufana como de ultraderecha. Bienvenido seas Primo de Verdad y bienaventurados sean los falanges de las JONS.
Ciertamente nuestro vecino tiene pronóstico reservado. México aún tiene solución. Indiscutiblemente existe un desazón y un desorden administrativo. También es cierto que el presidente no le hace caso a nadie. Como buen redentor o como excelente predicador su verdad, es la verdad absoluta. Hoy retraso mi postura sobre el presidente, pero lo que no postergo es el señalar que estas manifestaciones, también se producto de una clase (pudiente) que se creía protegida y hoy, ve amenazados sus intereses y su única forma de protestar es generando discriminación y encono en la sociedad. ¿Quién tiene más valor? Un obrero de FEMSA o un integrante del consejo de administración de TELEVISA.
Abraham Alvarez
@abraham_AAR