El mayor contrario que el hombre tiene es el hambre
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El Quijote II, 22
Muy agradecidos quedan con don Quijote, por haber favorecido su causa, Basilio el pobre y la bellísima Quiteria cuando contra su voluntad trataron de casar a ésta con Camacho el rico.
Les dice don Quijote a ambos que los ardides ideados por Basilio para impedir, ya en plena boda, que su amada casase con Camacho, “no se pueden ni deben llamar engaños” porque ponen en la mira virtuosos fines. A continuación les explica lo siguiente:
“Y que el de casarse los enamorados era el fin de más excelencia, advirtiendo que EL MAYOR CONTRARIO QUE EL AMOR TIENE ES EL HAMBRE y la continua necesidad, porque el amor es todo alegría, regocijo y contento, y más cuando el amante está en posesión de la cosa amada, contra quien son enemigos opuestos y declarados la necesidad y la pobreza”.
En efecto, según cualquiera lo puede comprobar o lo habrá vivido, por mucho amor que haya, como bien dice otro sabio refrán español, “donde no hay harina, hay mohína”.
@jagarciavilla
El mayor contrario que el hombre tiene es el hambre
