Ellas se venden solas
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“Por supuesto que en este siglo ya no tenemos (afortunadamente) el programa Siempre en Domingo que, en su momento, hacía que todos los mexicanos tuvieran los gustos demasiado uniformes.”
1.- En primer lugar, hagamos una pausa en nuestras actividades cotidianas y pongamos la mente en blanco. Libre de prejuicios, introyectos o necesidad de destruir a cualquiera de las celebridades que nos aparezcan en las pantallas de nuestros dispositivos electrónicos. Ahora imaginemos a la cantante Alejandra Guzmán y a su hija Frida Sofía. ¡Y, en automático, se acaba la mente en blanco! Estoy seguro que todos ya están pensando en el pleito público en el que ambas están enfrentadas.
2.- Es que de verdad, todos caímos redonditos. Eso de que Frida Sofía estaba peleada a muerte con su preciosa “sobrina-prima” Michelle Salas y que más recientemente se enfrascó en una ferviente guerra contra su madre, Alejandra Guzmán, no era más que una vulgar campaña de mercadotecnia para vender música. No cabe duda que, en este mundo tan borracho de internet, elegimos no ver la realidad: la Historia siempre se repite.
3.- Pongamos contexto. Hace 30 años, cuando la Guzmán lanzó su carrera, el camino que emprendió para alcanzar gran éxito casi instantáneo fue: 1) Grabar “Bye Mamá” un tema en el que le reprochaba a Silvia Pinal, su madre, lo abandonada que se sentía. 2) Presentarse en “Siempre en Domingo”. 3) Mostrarse emocionada y casi arrepentida cuando Raúl Velasco, el conductor del mencionado programa, la enfrentó con la Pinal frente a las cámaras. El resultado fue el lanzamiento más exitoso que Alejandra pudo haber imaginado.
4.- Por supuesto que en este siglo ya no tenemos (afortunadamente) el programa “Siempre en Domingo” que, en su momento, hacía que todos los mexicanos tuvieran los gustos demasiado uniformes. Pero con las redes sociales en nuestras manos, todos tenemos herramientas de comunicación, promoción y venta más poderosas que las que tuvo Raúl Velasco en la cumbre de su poder. Y esto lo tuvo muy claro desde siempre la joven Frida Sofía.
5.- Mientras Michelle Salas, bisnieta de Silvia Pinal e hija de Luis Miguel empezó a aparecer, toda hermosa, haciendo videos en los que habla de su vida personal, sus gustos y ofrece consejos para que todos puedan imitar su estilo de vida lleno de glamour, Frida Sofía hizo historias de Instagram donde, entre iracunda y fastidiada, decía todo lo mal que ella veía en Michelle. Dando a entender que nosotros, como público, no podíamos conocer “lo horrible” que es Salas en realidad. Por su parte, Michelle ni siquiera se dignó a comentar ni a seguir el juego.
6.- Si acaso algo escuchamos fueron frases conciliadoras por parte de algunas de las integrantes del Clan Pinal. Pero luego Frida Sofía empezó a escalar hasta niveles insospechados: acusando a su madre de no tomarle llamadas, de ser egocéntrica y hasta insinuando que la Guzmán pudo haberse involucrado sentimentalmente con uno de sus ex novios. Ya con esto último, Alejandra reviró y ofreció una “entrevista de pasillo” en la que se defendió exigiendo a su hija, a través de los medios, que esos temas se resolvieran en privado.
7.- Y ya cuando todos estábamos más atentos que nunca a sus historias escabrosas ¿qué sucedió? ¡Que Alejandra Guzmán y Frida Sofía lanzaron, el mismo día, un tema musical cada una por su lado! “Mi enfermedad” es el de Alejandra, muy en su estilo rockero, mientras que Frida lanzó “Ándale” un tema en “spanglish” de influencia mucho más contemporánea aunque, evidentemente, muy apoyada por la “magia” de los ingenieros de audio. ¿Qué nos queda de todo esto? ¡Que todas las Pinal se saben vender solitas y ya no necesitan a ningún Raúl Velasco!
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