Es enviado a la cárcel por defender a su madre de los golpes de su ex pareja

Luis estaba en su cuarto hace unos días, cuando a las 4.30 de la madrugada escuchó que su madre discutía con alguien, según reporta NY Daily News. La mujer, de 37 años, estaba en medio de un pleito y a los gritos con su ex pareja, Stanley Washington. Pero cuando ella estaba por entrar a su apartamento, el hombre la siguió y comenzó a golpearla.

El joven, de 18 años, al escuchar que su madre estaba en peligro, no lo pensó dos veces y decidió hacer algo al respecto. Su tenacidad y valentía no estaba en duda, pues quería defender a su madre.

De repente, al ver a su madre siendo golpeada por el hombre, tomó la decisión de salir corriendo en su ayuda. Entonces, ambos hombres se trenzaron en lucha. Luis, jugador de football americano de una escuela secundaria de Bronx, en Nueva York, tal vez no midió la fuerza de su cuerpo y comenzó a apretar con su brazo el cuello de la ex pareja de su madre.

La mujer, que se había desmayado momentáneamente debido a los golpes recibidos por su ex, se despertó en el momento en que su hijo estaba asfixiando al hombre hasta matarlo. La policía llevó detenido al joven y aún se investiga si actuó en legítima defensa de su madre.

Según la policía y lo reportado por NY Daily News, el agresor de la mujer tendría un amplio prontuario criminal y ya había estado involucrado en situaciones de violencia doméstica.

Él quiso defender a su madre

Según los comentarios en las fotos de facebook de Luis, el joven que ahora está imputado por homicio, sus vecinos y conocidos alegan que él era un buen chico. Un vecino llamado Nives dijo “Le encanta jugar al baloncesto y al fútbol con sus amigos. Cuando oí la noticia, no esperaba que fuera él, pero tenía razón al defender a su madre. Es un buen estudiante que no está involucrado con las drogas o salir con gente mala", dijo el hombre en su defensa.

Al parecer, y haciendo uso de su fuerza que en ese momento se volvió irracional, el hijo dio todo por su madre, al verla desmayada tras los golpes de su ex pareja. Cualquier hijo hubiera defendido de esa manera a su madre. Tal vez no pensó que lo mataría y sólo quería darle "una lección", pero lo cierto es que ahora, las consecuencias penales estarán a cargo de la justicia.

Salir de las relaciones violentas

El hombre ya había golpeado a la mujer otras veces. Y había vuelto allí para buscarla. Probablemente si no hubiera estado el hijo para defenderla sería ella la que hubiera estado muerta.

Las cifras de violencia doméstica en el mundo son alarmantes. Según la organización UnWomen, 1 de cada 3 mujeres sufre violencia de parte de su pareja, y se estima que el 35% de las mujeres han sufrido alguna vez en su vida algún tipo de violencia por parte de su pareja sentimental. Además, y según la misma fuente, las mujeres que han sufrido maltrato físico o sexual por parte de sus compañeros tienen más del doble de posibilidades de tener un aborto, y casi el doble de posibilidades de sufrir depresión, en comparación con las mujeres que no han sufrido violencia por parte de su compañero.

Buscar ayuda puede salvarte la vida

En muchos países existen leyes en contra de la violencia doméstica, sin embargo, esas leyes son violadas sistemáticamente todos los días. Muchas restricciones perimetrales para que el acosador no llegue a la víctima son violadas a diario, hasta que la víctima se encuentra con su agresor y el desenlace llega a ser trágico. La ira de las personas violentas enceguecen su raciocinio, y no dejan medir sus consecuencias.

Muchas mujeres no buscan ayuda por vergüenza o porque siempre piensan que la situación puede mejorar. Otras, piensan que ellas mismas son las culpables y que merecen ese maltrato. La realidad es que la violencia doméstica es un flagelo social que termina con la vida de miles de mujeres alrededor del mundo, por lo que es necesario aplicar las medidas necesarias para que las mujeres se sientan contenidas y protegidas ante una situación de violencia.

Buscar ayuda puede salvarte la vida. No te quedes con la idea de que todo puede cambiar. El amor no es violento ni represivo. Los golpes, insultos y burlas no son sinónimos de amor. Busca ayuda para ti o para cualquier mujer que creas que está en peligro. Y tú ¿has sufrido alguna vez alguna situación de violencia doméstica?