Es hora de formar defensores de derechos humanos a nivel internacional: Irene Spigno

Por: ARMANDO RÍOS / Fotos: OMAR SAUCEDO

A cinco años de la creación de la Academia Interamericana de Derechos Humanos (AIDH), una nueva dirección fue puesta en manos de la doctora Irene Spigno, quien asegura que los tres grandes retos que esperan para esta nueva gestión, se enfocarán en la consolidación de los observatorios, en la interacción con víctimas y sociedad civil, y en la internacionalización de la institución.

Tras la reciente salida de Luis Efrén Ríos Vega como director general de la AIDH, la titularidad del organismo quedó a cargo de Irene Spigno (Caglari. Italia: 1980), quien llegó a México con doctorados de la Universidad de Siena en Derecho y Economía.

En Saltillo, la especialista ha encabezado los estudios en Derecho Comparado en la institución adherida a la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC), y participó como Secretaria Académica en la profesionalización de personas interesadas en el derecho con perspectiva de derechos humanos.

Spigno destacó que desde su creación, AIDH se ha esforzado en establecer diálogos sobre derechos humanos fuera de sus escritorios. Así, la academia -que construye instalaciones en el Campus Arteaga de la UAdeC-, ha generado informes respecto a la situación de Coahuila sobre el tema, y ha figurado como moderadora en debates y acuerdos entre sociedad civil y gobierno.

“Es muy común que los académicos se queden en sus cubículos pensando, pero realmente ese trabajo necesita una salida práctica”, expresó, “Y la salida práctica es con los periodistas, con los defensores, con las mujeres, con niños, niñas y adolescentes, con migrantes y refugiados. Mi idea es la de ir fortaleciendo y consolidando estas líneas y trabajar con estas prioridades que se han ido trabajando y que necesitan mayor consolidación”.

Como uno de los momentos de consolidación, la Miembro del Sistema Nacional de Investigadores, Nivel I, sostiene que llegó la hora de que la AIDH empiece a formar defensores de derechos humanos y académicos del tema que puedan debatir y delegar a nivel internacional.

Para ello, una de las acciones que presenta como ejemplo de ese esfuerzo, es la participación de relatores de las Naciones Unidas en sus diferentes tratados para conocer la entidad, observe el trabajo de la AIDH y contribuya con su conocimiento.

“Trabajamos en los primeros cinco años en la generación de los proyectos, y ahora podemos tener profesionistas, estudiantes preparados para competir en un mundo global; que puedan ofrecer su profesionalismo también en inglés, y esto abre muchas oportunidades”, destacó.

El plan de internacionalización de la AIDH ya tiene un camino andado por el estudio del Derecho Comparado, pues en él se buscan y analizan con rigor académico cuáles son las mejores prácticas de otros países en sus marcos legales para mejorar la situación de Coahuila, de México, y del mundo.

“Cuando hablamos de perspectiva comparada o internacional”, explicó, “lo que hacemos es tener como fuente de referencia tratados internacionales, documentos y leyes en una materia específica. Se trata de buscar soluciones a problemas comunes”.

Una de las preguntas más frecuentes entre la sociedad civil en general es cómo se emplean de forma práctica los logros o descubrimientos que pueden generarse desde la academia, y en ese sentido Irene Spigno, destacó que lo que se puede hacer es crear modelos que las instituciones competentes puedan emplear para sus políticas.

La Academia Interamericana de Derechos Humanos ha sido uno de los organismos anexos a la UAdeC más cuestionados en los últimos tres años, al grado que algunos legisladores del Congreso del Estado dijeron que la institución es un “elefante blanco”.

Los críticos consideran que la AIDH trabaja en asuntos que podría atender la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Coahuila (CDHEC). En respuesta a tales señalamientos, Spigno estableció que las facultades de ambos órganos son totalmente distintos.

“La CDHEC recibe quejas de ciudadanos que han tenido un problema con la autoridad, y su ‘órgano de amparo’ es la Comisión, (que también) tiene actividad de capacitación”, explicó.

“La Academia, por otro lado, es una institución universitaria, que se dedica a la investigación de carácter científico, y no recibe denuncias, quejas o recomendaciones propiamente dichas, para las autoridades”, agregó. “Podemos emitir recomendaciones en sentido académico, como un grupo de trabajo, pero no como si fuéramos un ombudsman”.

Irene Spigno abundó: “Podemos ayudar a generar políticas públicas, que son las que realmente van a generar un cambio en la sociedad civil. Unas de las estrategias que hemos estado haciendo es colaborar con el Gobierno en la elaboración del Plan Estatal de Derechos Humanos”.

En el Plan Estatal de Derechos Humanos 2019-2023, se detallan las acciones que se tomarán en los próximos cuatro años por parte de las autoridades locales, para atender las carencias y los errores que se presenten en materia de derechos humanos en las cinco regiones de Coahuila.

Este plan fue realizado con la integración de diversos foros que trataron cinco ejes específicos, entre los que se encuentran la atención a temas como vivienda digna y educación, inclusión social, transparencia y rendición de cuentas, justicia laboral, periodistas y defensores, hasta desaparición forzada, migración y violencia de género.

De acuerdo con la Academia Interamericana de Derechos Humanos, que fungió como redactora del Plan, para realizar el proyecto fue indispensable, primero, generar un diagnóstico que revelara los puntos neurálgicos e importantes que deben atenderse en términos de defensa de los Derechos Humanos en la entidad, a través del cual se definieron ejes de trabajo.

“Este diagnóstico se realizó con diferentes medidas, consultas con sociedad civil, con datos de las instituciones competentes, actores específicos que pudieran darnos una idea más completa de las necesidades reales del Estado”, expresó la nueva Directora General de la AIDH.

En el Plan Estatal de Derechos Humanos, se incluyen estrategias para resolver cada situación, así como sugerencias de política pública.

Por otro lado, se determinó contar con un mecanismo para el seguimiento y evaluación del cumplimiento de lo que implica el programa.

Otra de las noticias y grandes retos que, en opinión de Spigno, tiene la AIDH, es mantener el contacto que ya existe con las autoridades federales y que recientemente se formalizó a propósito de la generación del Plan Nacional de Derechos Humanos.

En efecto, Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, inició en Saltillo consultas y análisis que los coahuilenses interesados pueden aportar al que será el documento normativo para todo el País.

La investigadora italiana comentó que aunque todos los temas -como la inseguridad y la agresión policiaca- tienen urgencia de ser abordados, una de las áreas de oportunidad que se deben atender a la brevedad son los de violencia de género y el de la educación.

“Si queremos resultados a largo plazo, el tema de la educación es el que puede cambiar las cosas”, expresó Irene Spigno.