Enésima protesta de jubilados de Coahuila contra nueva Ley de Pensiones
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Nuevamente los profesores de la Sección 38, de la UAdeC y la Narro, se manifestaron en la Plaza de Armas
Para seguir presionando a las autoridades, de nueva cuenta profesores de la Sección 38, UAdeC y de la Narro se apostaron ayer frente al Palacio de Gobierno y una vez más manifestaron su repudio a las nuevas Leyes de Pensiones y del Seguro Médico.
Ésta vez, los inconformes salieron a las calles a exigir se realicen auditorías externas a las instituciones de seguridad social, sanciones administrativas y hasta penales a quienes resulten responsables por desvío de recursos y malversación de fondos conforme al resultado de dichas auditorías.
Apenas el pasado jueves 4 de febrero, unos 150 profesores jubilados y activos bloquearon las calles adyacentes a la sede del Ejecutivo, a la Plaza de Armas y a la Catedral de Santiago, luego de que el secretario de Gobierno, Víctor Zamora no los recibió por no encontrarse en el sitio.
Nuevamente, con pancartas solicitando medicamentos, un servicio médico digno y otros reclamos como la derogación de las nuevas leyes, los docentes activos y jubilados expresaron sus inquietudes.
“Dichas reformas y adiciones a la ley nos han lastimado de manera grave a nuestros intereses. El servicio médico en lo particular es una situación grave que está afectando de manera muy delicada”, señaló uno de los inconformes.
En sus manos, algunos profesores desplegaron pancartas con leyendas como “Pensiones de 37,000 para todos los coahuilenses. ¡Ya no manchen nuestro honor!”, “Unidos contra las reformas de pensiones y el Servicio Médico de la Sección 38” y “No vamos a seguir muriendo en las clínicas del magisterio”, entre otras.
En esta ocasión, fueron uno 60 profesores los que se juntaron en la Plaza de Armas, pero no fueron recibidos.
La protesta se disolvió en una hora, pero con la advertencia de que iban a diseñar una serie de manifestaciones “más duras y más contundentes”.
La inconformidad de los profesores aumenta porque afirman que el servicio médico que reciben en la Clínica del Magisterio es de ínfima calidad, donde además no les dan el medicamento que los médicos les recetan.
Otra de las inconformidades de los manifestantes es la nueva Ley de Pensiones que propone el Ejecutivo del estado.