Jenni Rivera vs. los Turcos

El lunes pasado tanto Televisa como Azteca Trece hicieron cambios en su programación recorriendo sus telenovelas y teleseries media hora para aterrizar sus noticieros estelares a las 22:30 Horas.  Los últimos aprovecharon estos cambios para estrenar en el nuevo horario de las 20:30 Horas la bio-serie no autorizada de “la Diva de la Banda”, Jenni Rivera titulada “Su nombre era Dolores, la Jenn que yo conocí” y basada en el libro de uno de sus managers, Pete Salgado, interpretado en la misma por el primer actor Javier Díaz Dueñas.

Todo bien hasta aquí, y al ver ya los primeros cinco capítulos de la misma, mejor, porque cuenta con una producción muy cuidada desde sus libretos en los que como sucedió el año pasado con “Hasta que te conocí”, contó con el trabajo entre otros del guionista y cineasta coahuilense Héctor Barrios, e interpretando a la misma Jenni Rivera con una actuación muy sorpresiva pero igualmente elocuente de Luz Ramos cobijada por otros primeros actores como María Rojo en el papel de su madre Doña Rosa; Tomás Goros como Don Pedro Rivera y Luis Felipe Tovar como Gabo, otro de sus managers, entre otros.

El problema es que para poder estrenar “Su nombre era Dolores …” Azteca Trece recorrió la teleserie turca que transmitió hasta el pasado viernes 5 de mayo, “Kuzey Guney” en el horario de las 20:00 Horas a las 12 de la medianoche, una maniobra que dudamos hayan consultado con los seguidores de la misma puesto que aunque justifican que tenía algunas escenas “subidas de tono” 

Lo cierto es que quizás el plan fue de ganar-ganar primero con “Su nombre era Dolores …” por lo bien que funcionaron a nivel rating el año pasado las bio-series “Por siempre Joan Sebastian” para Televisa y “Hasta que te conocí”, de Juan Gabriel, pero también para combatir de alguna manera el horario de la medianoche que prácticamente tiene dominado Gala TV con narco-series como “El señor de los cielos”, pero en realidad si bien ganaron con la primera perdieron con la programación de “Kuzey Guney” al incurrir en algo que daña mucho a las televisoras que viven primordialmente de la publicidad: la falta de respeto hacia su público asiduo.

¿Será que con el ya muy próximo estreno del refrito de “Nada Personal” se quisieron transportar a la década de los 90 cuando entonces programaban como querían series colombianas o brasileñas en horarios de medianoche y cortaban inclusive sin decir agua va? Lo cierto es que no vivimos los mismos tiempos, y menos con la oferta de plataformas como Netflix, con las que se cambia sólo de control .

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