‘La Lavandería’
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Netflix sigue sorprendiendo gratamente en relación a estrenos importantes del cine internacional con la llegada desde el pasado viernes de “La Lavandería” (“The Laundromat”), el más reciente filme del cineasta norteamericano Steven Soderbergh.
Justo este año Soderberg cumple 30 años de actividad cinematográfica desde que su prestigiado debut en el Festival de Cannes de 1989 donde ganó la Palma de Oro por su visionaria ópera prima “Sexo, mentiras y video”; en el año 2000 fue reconocido con su primer Oscar hasta la fecha por su no menos transgresora aproximación a las redes del narcotráfico que se siguen entrelazando desde Washington hasta nuestro país en “Tráfico” y en fechas más recientes fue de los pioneros del cine digital de alta calidad con cámaras más pequeñas pero contenidos igualmente sustanciosos donde siguió contando historias relacionadas a la corrupción del sueño americano.
Es así como llegamos a su más reciente filme “La Lavandería”, que antes del estreno mundial en la plataforma de Netflix el fin de semana pasado tuvo su premiere internacional en el no menos prestigioso Festival Internacional de Cine de Venecia donde compitió nada menos que contra la aclamada “Guasón”, de Todd Phillips, por el máximo premio de este evento, el León de Oro, por recrear a manera de sátira lo que a principios de abril del 2016 se conoció como un escándalo mediático internacional denominado “Los Papeles de Panamá” por apuntar a una firma internacional encabezada por dos socios de apellidos Mossack y Fonseca y con domicilio en la ciudad de Panamá que realizaron un fraude multimillonario a través de lavado de dinero.
“La Lavandería”, basándose en un guion adaptado por uno de sus guionistas de cabecera de Soderbergh en la última década como Scott Z. Burns (“El desinformante”; “Contagio”) del libro “El Mundo de la Secrecía” original de Jake Bernstein, se centra por un lado en Mossack y Fonseca (interpretados por los primeros actores Gary Oldman y Antonio Banderas) narrando la forma en la que fueron embaucando desde grandes personajes empoderados del mundo hasta simples mortales como el caso ficticio de Ellen Martin (la tres veces ganadora del Oscar Meryl Streep), una mujer que como muchos de los afectados en la realidad al quedar viuda tras un accidente turístico en lugar de obtener los supuestos beneficios generados del seguro de su cónyuge lo único que consigue es una negación de lo que le corresponde.
Es cuando tras recibir negativas de un lado y del otro, la mujer se propone hacer la investigación de este fraude por su cuenta para terminar la actriz con un magistral monólogo que compensa la ligereza que algunos han criticado del filme, cuando en realidad el punto de vista y la forma de narración en segunda persona por la que optó Soderbergh en esta ocasión fue precisamente para hacer más digerible la comprensión para el espectador de un tema que a primera vez pudiera parecer muy complicado cuando en realidad se resume simplemente en la voracidad de una élite en el poder a nivel global a quienes los que menos le importan es pasar por encima de quien sea con tal de seguirse enriqueciendo.
Comentarios a: galindo.alfredo@gmail.com;
Twitter: @AlfredoGalindo