La mujer no debe ser un objeto

“Me parece muy bien que se acaben desfiles, publicaciones y otros escenarios donde la mujer se exhibe mientras los hombres juzgamos su belleza para aceptarlas o rechazarlas”.

1 Después del escándalo generado por la protesta visual que Mon Laferte hizo desnuda de la cintura para arriba, siguen surgiendo noticias que tienen que ver con la posición de la mujer en la sociedad. Lo más reciente fue la cancelación definitiva del famoso desfile de Victoria’s Secret que venía haciéndose anualmente desde 2001. Protagonizado por las modelos más altas y delgadas de la historia mundial, luciendo la lencería más lujosa y portando enormes alas de ángel en la espalda.

2 Los ángeles de Victoria acaparaban la atención del público, año con año, en este desfile donde se presentaban también números musicales con los artistas más vanguardistas. El punto central del espectáculo solía ser la presentación de las piezas de “lencería-joyería” con diamantes u otras aplicaciones y cuyo costo solía ser de millones de dólares. Un verdadero “performance”, extravagante hasta decir ¡basta! Sin embargo, todo este show y su parafernalia ya no volverán a presentarse.

3 Al leer esta noticia, yo solo tuve una frase muy concreta en mi mente: “¡Qué bueno que se acaban!” Los estándares físicos absolutamente irreales (e incluso peligrosos) que las modelos de este tipo de eventos suelen tener, provocan baja autoestima, complejos y hasta depresión en las mujeres que las contemplan. En promedio, esas modelos miden 1.80 metros de altura y pesan sólo 55 kilos. Así que, las personas normales que quieran imitar esa proporción de altura y peso, solo lograrán poner en peligro su salud e incluso su vida.

4 Ahora bien ¿por qué se acaban los desfiles de Victoria’s Secret? Hay varias razones algunas más oscuras que otras y vamos a analizarlas aquí. La “razón oficial” es que los ratings de televisión están bajando y la enorme inversión que se requiere hacer en esos espectáculos, no necesariamente se está reflejando en las ventas de la marca, posteriores al desfile. Sin embargo, otras personas piensan que el estándar de belleza que ellos promueven ya no encaja con el espíritu de diversidad que ahora se tiene en todo el mundo occidental.

5 Puede ser. Quizá las personas más bajitas, o más morenas o menos delgadas, se están hartando de no ser consideradas hermosas, o dignas de desfilar por ese tipo de pasarelas internacionales. Pero también hay que considerar que la televisión está viviendo la crisis más grande de toda su historia. Las nuevas generaciones no la ven. Se entretienen con sus celulares, tablets o laptops conectadas a internet. De modo que, si los ángeles de Victoria se seguían presentando en televisión, las nuevas generaciones ni siquiera las iban a conocer.

6 Sin embargo, hay otra razón mucho más oscura que podría estar obligando a Victoria’s Secret a buscar otros modos de hacer publicidad para su marca. Y es una razón que también está mandando a Playboy a la tumba. Las personas, con internet en la mano las 24 horas del día, tienen acceso más rápido que nunca a la pornografía. Y gratis. ¿Para qué ver modelos en lencería? ¿Para qué esperar un mes a que salga la nueva revista impresa? Eso de que ahora “somos más conscientes de la diversidad” podría ser una falacia.

7 De todos modos, y siguiendo con la urgente necesidad de lograr mejor equidad entre hombres y mujeres, me parece muy bien que se acaben desfiles, publicaciones y otros escenarios donde la mujer se exhibe mientras los hombres juzgamos su belleza para aceptarlas o rechazarlas según los estándares que mejor nos parezcan. La apariencia de una mujer ya no debería ser su boleto al éxito. ¡Ponte a temblar Miss Universo! Es tu turno de desaparecer.

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@felixrivera333