Más vale pájaro en mano que buitre volando
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El Quijote I, 31 y II, 71
Cuando Sancho Panza regresa de entregar en el Toboso una carta, que en realidad no entregó, enviada por don Quijote a Dulcinea, éste le pregunta al escudero: “¿Qué te parece a ti que debo yo de hacer ahora cerca de lo que mi señora me manda que la vaya a ver?”.
Le dice el caballero andante que así lo hará. Pero antes cumplirá la promesa hecha a la princesa (en realidad Dorotea, que así se burla de don Quijote), quien le había pedido fuera a enfrentar al gigante Pandafilando de la Fosca Vista que tenía usurpado su reino. Que su padre había dejado escrito que el caballero que degollase a dicho gigante podría tomarla a ella por legítima esposa y también posesión de su reino. Esto entusiasma mucho a Sancho porque siendo rey don Quijote, él al menos llegará a ser duque.
Por eso, cuando su amo le dice que primero cumplirá lo prometido y de inmediato regresará para ir a ver a Dulcinea, Sancho entiende que no habrá de casarse con la supuesta reina y por ello perderá el reino de ésta que, dice, ha “oído decir que tiene más de veinte mil leguas de contorno y que es abundantísimo de todas las cosas que son necesarias para la vida humana y que es mayor que Portugal y que Castilla juntos”. Le dice que no debe desaprovechar la oportunidad y tomar a la reina por esposa.
Continúa el escudero su alegato así: “Y advierta que ya tengo edad para dar consejos, y que este que le doy viene de molde, y que MÁS VALE PÁJARO EN MANO QUE BUITRE VOLANDO”.
Sebastián de Horozco, contemporáneo de Cervantes, escribió al respecto: “Este refrán quiere decir lo que por otro más claro se dice que más vale lo cierto que lo dudoso”.
Y Gonzalo Correas, también de la misma época, hizo notar a propósito de este dicho que “el sentido común es: que vale más poco en la mano seguro que mucho incierto”.
El propio Correas dio cuenta de otra versión del refrán, aparentemente poco usada, que decía: “Más vale un pájaro en la mano que dos volando”. Que fue más o menos como pasó a México, donde decimos: “Más vale pájaro en mano que ciento volando”.
@jagarciavilla