Mientras haya vida, hay esperanza
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La década de los ochenta fue para descubrir la música y sus diferentes géneros así como el cine y todos sus íconos, tanto internacionales y nacionales, muchas más cosas que influenciaron en mi niñez.
Empero, recordando al gran cronista público Carlos Monsiváis: también los ochenta fueron una era de devastaciones económicas y sociales, la caída de la credibilidad de nuestro gobierno y la desilusión de creer en una clase política estaba al servicio del bien común.
Se comenzó a escuchar de entre las ruinas del viejo sistema: la sociedad que se organiza, ¡La sociedad civil! Idea que a más de uno, todavía le causa precaución, sino es que miedo.
De esta cuarentena, ¿qué vendrá después?, ¿seremos los mismos?, ¿hacia dónde nos llevan?, o mejor dicho, ¿hacia dónde tendremos que dirigir nuestra historia?
No me equivoco al estar convencido que las respuestas las tendremos que provocar cada uno de nosotros: mujeres y hombres mexicanos.
Como sociedad que formamos, estamos llamados a fortalecer esa idea de organizarnos y ser mucho más creativos, de lo que hemos sido en el pasado.
Estoy convencido de que mientras haya vida, hay esperanza, y quiero seguir creyendo en ti, por eso te comparto lo siguiente, hazlos tuyos, compártelos y entre todos saquemos lo más humano que
somos:
La vida es frágil: ¡Valórala y compártela!
Los trabajos son temporales, no te cierres a uno de ellos.
Tu salud es tu riqueza. ¡No hay mejor medicina que tu comida!
Aprecia a quien tienes a tu lado. ¡Disfrútalo y goza que no estás solo!
Ahorra dinero. ¡No compres cosas que no necesites!
Aprovecha el tiempo libre que pedías. ¡No lo tienes cuando trabajas!
Necesitamos una mentalidad fuerte y creativa, ¡para crear nuevas soluciones!
Hay que adaptarse, no conformarse. ¡Hemos sobrevivido a peores epidemias!
Estamos llamados a construir nuevas oportunidades. ¡No maldigas la oscuridad, mejor enciende una luz!
Esto también pasará y seremos más fuertes.
No hay virus más peligroso que el del pesimismo y la indiferencia, por eso, no dejemos de pensar y de pensar juntos para salir de esta crisis juntos.
Adolfo Huerta Alemán, clérigo.
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