Narciso Rodríguez, 20 años de oficio y talento
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Oficio y talento de la moda, Narciso Rodríguez celebra veinte años en esta industria cada vez más exigente, en la que muestra su preferencia por 'caminar con más calma', mostrando su amor por las cosas que perduran.
A Narciso Rodríguez, de origen cubano nacido en New Jersey (Estados Unidos) en 1961, le gustan la costura sencilla y práctica. Teniendo muy presente sus raíces, suele combinar colores tan llamativos como el naranja con el rojo, aunque en su carrera no ha faltado el siempre elegante negro, así como los blancos, azul marino o gris.
Rodríguez no esconde sus raíces hispanas, que han influido en su forma de entender la moda:
Narciso Rodríguez adora crear piezas que la mujer pueda usar ahora y en el futuro, de terminaciones perfectas, propuestas con las que dice, "me gusta empoderara a la mujer".
Tras 20 años en la moda, Narciso Rodríguez ha decidido echar el freno y parar. Se toma con más calma la creación y ha decidido hacer solo dos colecciones al año, porque según refiere, prefiere ver crecer a sus hijos, los mellizos Ivy Carolyn y Callum.
A lo largo de su trayectoria, siempre ha sido fiel al minimalismo y a la sobriedad, un estilo de escasas concesiones a lo decorativo que a algunos les parece la quintaesencia del diseño.
El término minimalista en la costura de Narciso Rodríguez esconde una gran complejidad . Su obra es complicada en corte, estructura, construcción y textura y, a la vez, su línea es simple y elegante.
Quienes han trabajado a su lado, dicen que Narciso Rodríguez es perfeccionista y uno de los últimos grandes costureros contemporáneos. Adora los diseños prácticos y que a la vez sean femeninos y atemporales.
APRENDIÓ DE DONNA KARAN
Estudió en la escuela Parsons de Nueva York. Empezó a trabajar en la industria de la moda con la firma Anne Klein que estaba vinculada a Donna Karan.
Después pasó a los talleres de Calvin Klein durante un periodo de tiempo en el que respiró y vivió con intensidad la esencia del minimalismo.
Seda, algodón y lino con sencillas caídas en pantalones, vestidos tienda y ligeros abrigos, todo ello principalmente en blanco y negro fueron sus básicos durante su estancia en Calvin Klein.
El siguiente paso fue trabajar para Cerruti y su periplo finalizó creando su propia firma en 1997.
Un año después presentó su primera colección en Milán. Con ella se convirtió en el niño bonito de la moda, todos deseaban sus diseños, le llovían los premios, especialmente en Estados Unidos.
Ese mismo año de 1998 la casa española Loewe le contrató como director creativo de su colección de prêt-à-porter femenino, cargo en el que estuvo hasta 2001.
Alguna concesión a la creatividad se permitió en Loewe, "fue una época dichosa, pero trabajar para una firma también significa perder identidad", explicó durante una entrevista el diseñador que, tras vivir entre Europa y Estados Unidos, decidió instalarse allí y trabajar para su propia firma.
CAROLYN BESSETTE Y MARTA ORTEGA, DOS NOVIAS PARA RECORDAR
Uno de los hitos de su carrera fue la confección del vestido de novia, en 1996, para su amiga Carolyn Bessette, la esposa de John F. Kennedy Jr., ambos trágicamente fallecidos en un accidente de avión pocos años después.
También han sido famosos sus diseños para Michelle Obama, Claire Danes, Rachel Weisz, Sarah Jessica Parker, Jessica Alba o la heredera de Inditex, Marta Ortega, una de sus mejores amigas para quien cosió su primer traje de novia cuando contrajo matrimonio con el jinete Sergio Álvarez, en 2012.
Con motivo de la celebración del quince aniversario de su fragancia For Her, en un encuentro para periodistas de belleza en el madrileño Hotel Santo Mauro, el diseñador dijo: "mi musa española es Marta Ortega".
El prestigioso Council of Fashion Designers of America (CFDA), conocidos como los Oscar de la moda, le otorgó el premio al mejor diseñador dos años consecutivos: en 2002 y 2003, el único creador que lo ha recibido dos años consecutivos.
Este año, Narciso Rodríguez ha vuelto a ser galardonado en la última edición de los prestigiosos premios CFDA con el galardón Geoffrey Beene a toda una carrera.
Anna Wintour, directora de Vogue en Estados Unidos, dijo que Narciso Rodríguez era "el único diseñador capaz de hacer maravillas con una simple línea".
