Nuevo estilo de política vecinal
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Están dos micrófonos dispuestos con sana distancia.
Se da el encuentro de dos mandatarios de países vecinos. No es virtual, cibernético, digital. Es presencial. Para los mandantes de ambas naciones esto se tipifica como acontecimiento. Se da la iniciación de actividades del nuevo tratado de libre comercio entre tres naciones vecinas, una de las cuales no está presente.
Se observa, en los mensajes que están presentando, un tono de respeto recíproco. De lenguaje amistoso, de reconocimiento de valores por sendos servicios oportunos que han recibido a causa no sólo de la vecindad sino de la compenetración poblacional. Se congratulan de haber logrado un acuerdo que beneficiará a toda la región. Se intenta la suficiencia y prosperidad de las tres naciones. Se busca organizar mejor su intercambio para que puedan ser proveedores mutuos, sin tener que recurrir a operaciones distantes y onerosas.
La humanización de las condiciones para los trabajadores, evitando injusticias, es una característica muy elogiable en este tratado. Se da ahora en Washington, una comunicación civilizada, diplomática que se concentra en el objetivo de celebración, de confirmación de las mejores actitudes y procedimientos, para no dificultar los objetivos de desarrollo común. Las diferencias en temas de seguridad y migración podrán tener su oportunidad para ser afrontadas en un diálogo igualmente maduro y digno.
Lo más esperanzador es la no identificación y permanencia en expresiones y tratos impolíticos anteriores sino optar ambos, voluntariamente, por un proceso de lograr experiencia y creciente mejoría, ya alcanzada en el estilo de este encuentro de alto nivel.
Hay cristales turbios y visiones prejuiciadas que no reconocerán la categoría de esta relación que todo el mundo ha contemplado y que muchos, no sólo envidiarán en sus respectivas regiones, sino buscarán intentar algo semejante para una recuperación pronta y asociada.
PROBABLE CONTAGIO AÉREO
Ante la insistencia de un numeroso grupo de científicos, la organización mundial que atiende la salud humana, ha concedido la probabilidad de que las gotículas puedan permanecer flotando en el ambiente, portando el virus invasor. Se indica que este riesgo puede darse en lugares cerrados de numerosa afluencia de personas que hablan, gritan, cantan y tosen o estornudan.
Un cubreboca de cualquier trapito, que se usa con nariz destapada o resbala hasta el mentón o sirve de hamaca a la papada, si no evita contagiar, tampoco protege de ser contagiado a quien lo porta. La única verdadera protección es la de no hacerse presente en sitios sin ventilación y muy concurridos.
Hay procesos avanzados en la preparación de una vacuna y ya hay muchas motivaciones para atender ese período en que la infección no llega a ser neumonía y, de alguna manera, puede evitarse que las células pulmonares sean alcanzadas. Se dan estadísticas de fallecidos pero, aunque no sean noticia de alarma, no se publican las mayorías que logran restablecerse y ser donadores de plasma para los casos graves.
LO MENTAL, LO MORAL Y LO MATERIAL
Muchos expertos y especialistas se concentran bien enfocados al próximo tener. Buscan los mejores trucos y atajos para recobrar lo perdido y luego abren el abanico de las posibilidades, intentando no cometer los mismos errores sino estrenar nuevas formas de intercambio y de acopio de bienes. No sirven ya los odres viejos para el vino nuevo. Los embudos deshumanizados fomentadores de desigualdad ya están hundidos en la obsolescencia. Están muy a la vista los mecanismos viciados que fueron astucia y ahora delatan infractores.
En el porvenir están ya las astas para izar banderas éticas. Justicia, solidaridad, subsidiariedad, rectitud, equidad, veracidad son virtudes personales y sociales que no podrán soslayarse. Sólo así también se podrá tener salud mental en que no se convierta el pasado en depresión y el futuro en ansiedad por evasiva atención en el presente. El reto es tener esa destreza y esa habilidad para hacer esa trenza de salud integral aunando lo mental, lo moral y lo material...