Participación ciudadana es la ruta para el cambio
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Lo mejor que pudo pasarle a los mexicanos es la situación internacional que actualmente atravesamos, que sacudieran nuestra conciencia y despertaran nuestro orgullo.
Se necesitaba de esta cadena de ofensas y de amenazas tan directas que se perciben como auténticas bofetadas con la impotencia de la desigualdad, que nos revelan el erróneo camino por el cual hemos permitido que nuestro País se conduzca.
Es momento de reflexionar y llevar nuestro enfado al punto correcto, debemos de dejarnos de nacionalismos superficiales que solo beneficiaran a unos cuantos y que solo les serán útiles a las autoridades políticas en la presente circunstancia.
Nacionalismos que ellos mismos promueven y auspician para que los mexicanos, los que aquí nacimos y vivimos, no volteemos a verlos como los culpables de las profundas desigualdades sociales y humanas de nuestro País.
Culpables de los exorbitantes abusos que han cometido con el atesoramiento para sí mismos y sus familias de nuestra riqueza nacional, a través de discursos y promesas que han usado para despojarnos de una vida digna y honorable.
Pregonar unidad nacional, valores y riqueza cultural es nacionalismo superficial cuando existen aproximadamente 50 millones de pobres en nuestro País. Es el momento de limpiar y ordenar nuestra casa, no de distraernos con los de afuera.
Las actuales campañas electorales claramente dan muestra del profundo arraigo cultural que la impunidad tiene en la clase política. Basta con escuchar sus discursos y frases de campaña para confirmar que están “colgándose” del sentir de la sociedad.
Evidentemente que nuestra indignación y hartazgo no serán suficientes para lograr cambiar nuestra realidad, es por eso que tenemos que dar pasos consistentes.
Decidámonos a participar en este proceso electoral, además de votar y promover el voto, trabajemos en redactar los 10 compromisos que los candidatos deban de cumplir, demostremos nuestro interés por el cambio hoy y ahora, empecemos por nosotros mismos y participemos, convenzámonos que solo la participación ciudadana decidida e inteligente logrará crear una sociedad organizada que incluya a gobernantes y ciudadanos capaces para hacer el cambio.
Pastor López Atilano
Presidente
Grupo Unidos por una Sociedad Responsable
pastorlopeza48@gmail.com