UAdeC y Seminario de Cultura Mexicana firman convenio: Comienza colaboración por la cultura y la ciencia
Las instituciones pactaron un acuerdo de intercambio este miércoles con la presencia de sus dirigentes, Salvador Hernández Vélez y Felipe Leal, quien además ofreció dos charlas
Desde su creación en enero del 2018 la Corresponsalía Arteaga del Seminario de Cultura Mexicana ha hecho presente a la institución dentro de la Universidad Autónoma de Coahuila, con conferencias, charlas y talleres, pero ahora este esfuerzo será aún más constante y preciso gracias al convenio firmado entre ambas partes.
Fueron Salvador Hernández Vélez, rector de la UAdeC, y Felipe Leal, presidente del SCM, quienes pactaron a favor de esta colaboración institucional, que traerá como beneficio todo lo que los miembros del Seminario, destacados artistas, historiadores y científicos, tienen para ofrecer a la comunidad universitaria.
No es la primera vez que el SCM realiza este tipo de convenios y Leal señaló en entrevista con VANGUARDIA que ya se ha hecho con otras instituciones como la Universidad Nicolaíta, en Morelia, el Colegio de Sinaloa, la Universidad Autónoma de Sinaloa, la Casa de México en España entre otras tantas más.
“En todos esos casos ha sido muy fructífera porque nos ha obligado a armar una serie de seminarios y talleres o una serie de índices temáticas sobre temas en específico que puedan atender a la cultura del lugar”, comentó.
“Por ejemplo con Sinaloa hemos trabajado mucho con la regionalización de toda la cuestión productiva, del campo, y de la cultura sinaloense, de la gastronomía”, agregó, “con Campeche hemos hablado de la restauración, de los piratas, las fortificaciones. En Michoacán hemos trabajado con cuestiones de los sismos y la historia de la Independencia de México y así vamos tomando temas que tienen que ver con la historia, con la restauración, la gastronomía y la crónica y ahora con Coahuila vamos a trabajar seguramente con temas que tengan que ver con el desierto, con la historia, con la crónica, la poesía, los temas más afines a la región”.
Aseguró que, además de la charla sobre albañilería que impartió, esa misma tarde del miércoles 6 de noviembre, en la Facultad de Arquitectura de la UAdeC en el Campus Arteaga y la presentación de su libro “Arquitectura” —donde estuvo acompañado por Hernández Vélez y Adriana Cerecero—, publicado por el SCM, habrá alrededor de cinco actividades más a lo largo de 2020; una de ellas será la participación del chelista Carlos Prieto en el marco de la inauguración del nuevo edificio de la Escuela Superior de Música en Ciudad Universitaria.
El Seminario de Cultura Mexicana cuenta con 25 miembros —más aquellos que forman parte de las corresponsalías— de los cuales la mayoría son parte del área de las artes, aunque Leal aseguró que el ramo científico está compuesto principalmente por mujeres; biólogas, astrónomas, neurocientíficas y químicas, entre otras.
De arquitectura
Tras la firma del convenio se llevaron a cabo dos actividades a cargo del propio Leal. La primera fue la charla “El arte de la albañilería” seguida de la presentación de su libro “La Arquitectura”, parte de una serie de publicaciones hechas por el Seminario.
Ante docentes y alumnos de la Facultad de Arquitectura la conversación posterior, durante la sección de preguntas y respuestas, generó una rica conversación entre público y expositor, quien además obsequió algunos ejemplares del texto presentado.
Entre los temas discutidos rescataron el conocimiento empírico y de campo de los albañiles, además de la relación de los arquitectos con las nuevas tecnologías y cómo emplearlas en la producción actual.
Además, en medio de la conversación, Leal recordó una anécdota cuando hizo la biblioteca de Gabriel García Márquez.
“A mí me sorprendió que no tenía tantos libros. Yo creí que haría una biblioteca para miles”, contó, “él me dijo ‘yo tengo cinco autores y los he leído y releído y no voy a leer nada más porque sino no tengo tiempo para crear y ellos me han alimentado’”.
El arquitecto señaló que de estos cinco dos eran autores japoneses cuyos nombres no recordó en ese instante, y a los cuales se sumaban el mexicano Juan Rulfo, William Faulkner y Milan Kundera.
Asimismo también rememoró cómo diseñó la biblioteca para que quedara a espaldas del escritor, de manera que cuando se sentara a escribir pudiera tener también a la mano su propia obra cuando deseaba consultar algún pasaje pasado.