Asegura Papa que la Iglesia es 'maestra de un sí generoso a la vida'
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Ciudad del Vaticano.- El Papa Benedicto XVI aseguró hoy que la Iglesia Católica es 'maestra y testigo de un sí generoso a la vida en todas sus dimensiones', al recordar su último viaje apostólico a Austria.
Al presidir la audiencia general de los miércoles en la Plaza de San Pedro del Vaticano ante más de 12 mil personas, el líder católico agregó que la institución que encabeza está empeñada en la paz y en el verdadero progreso social.
Recordó que el objetivo primordial de su visita a Austria fue el peregrinaje al santuario de Mariazell para celebrar el 850 aniversario de su fundación, actividad que cumplió el sábado tras una serie de empeños el viernes.
Estos fueron una oración ante la Columna de María en la plaza 'Am Hof' de Viena, el homenaje a las víctimas del Holocausto en la 'Judenplatz' (plaza de los judíos), así como los encuentros con el presidente Heinz Fischer y el cuerpo diplomático.
Esta última cita, en el Palacio Hofburge de la capital austriaca, fue calificada por el pontífice como una 'ocasión preciosa' para 'exhortar a los responsables de las naciones a favorecer la causa de la paz, del auténtico desarrollo económico y social'.
'Mirando especialmente a Europa renové mi ánimo a llevar adelante el actual proceso de unificación sobre los valores inspirados al patrimonio común cristiano', apuntó Benedicto XVI.
De la última jornada de su gira apostólica evocó su defensa, en la catedral de San Esteban en Viena, del domingo como 'día del Señor', porque 'sin Dios y sin su día no podemos vivir'.
El encuentro con el mundo del voluntariado, el último de los episodios del viaje, fue recordado también por el Papa y afirmó que la caridad católica no es sólo un modo de hacer sino, ante todo, un modo de ser.
'La acción del voluntariado no debe ser vista como una intervención tapagujeros del Estado o las instituciones públicas, sino como una presencia complementaria y siempre necesaria para tener viva la atención a los últimos', dijo.
Todos pueden ser voluntarios, concluyó, también la persona más indigente o con menos posibilidades tiene seguramente mucho por compartir con los demás ofreciendo la propia contribución por construir la civilización del amor.