Rescata alumnos; atesora recuerdos
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Saltillo, Coah.- Saber escuchar."He tenido alumnas que ya de grandes han tratado de suicidarse. Las escucho y las aconsejo. El deber de uno es ese. Si el niño no le dice a nadie y nos dice a nosotros es porque confía", dice la maestra Francisca Cuéllar Torres, ganadora del concurso "Porque son los mejores 2005", premio con el que Vanguardia reconoce la trayectoria de los maestros y alumnos más destacados.
 "Cuando he podido intervenir, intervengo. Le hablo a quien esté de responsable y le digo `aguas, la niña trae esto o lo otro'. Todos los maestros tenemos la responsabilidad de involucrarnos no solamente en el aprendizaje, sino también en lo que los niños traen de la casa", recomienda.
"Cuando están distraídos o no quieren estar en la escuela, o están llorando, no lo podemos dejar así como que está chiflado y ya. He tenido casos graves de niños que me han hablado a altas horas de la noche y me dicen "profe, me voy a suicidar.
"No, espérate, cómo, dónde estás, les pregunto, y me dicen que están en la escuela", dice llena de angustia.
"Soy dura, les digo que no son los únicos que tienen problemas y como que lo entienden, pero no quieren que se enteren en su casa, ¿por qué?, porque en la casa están fallando".
Una lección.
"Los niños dan lecciones todos los días, cómo no entender a un niño o exigirle de más sin saber todo lo que trae atrás. El año pasado una niña a la que yo le exigía -cuando tengo sexto siento la responsabilidad de que pasen el examen a secundaria- le estaba pidiendo mucho hasta que platica conmigo, investigo y me doy cuenta de que no tiene ni papá ni mamá.
"Después uno los entiende, te das cuenta de por qué son así. Ese tipo de lecciones nos las dan mucho en la escuela que estoy en la tarde porque hay muchos niños con problemas muy graves, con padres divorciados, que viven con la abuelita, de situación económica baja y uno tiene que estar mediando, exigirles pero también ver el lado humano", sigue contando.
Cambios en la educación.
"Tomaría más en cuenta a los maestros desde la base. Ahorita que soy maestra y directora, comprendo mucho al maestro que está en grupo. Muchas cosas vienen desde mero arriba. Alguna disposición y todo le cae al de abajo, que la hace de bombero, enfermera, policía, la hace de todo y aparte le piden resultado en el aprendizaje de los niños", detalla.
"Si se piensa en una reforme educativa ésta no debe de salir de un escritorio, sino del que está toreándose con papás, lidiando a diario con autoridades, con los niños. Ese es el que se debe reconocer, ese es el bueno.
"Yo siempre he criticado eso, que si vas a premiar a alguien sea el que lo merece. Este año, qué bueno que el Gobernador lo hizo, lástima que no me tocó porque cuando daba sexto envié muchos niños a la Olimpiada del Conocimiento y premiaban al director, al inspector. y al maestro que se había esforzado, nada. Qué bueno que este año el Gobernador decidió premiar a los maestros", agradece.
Y agrega: "También me gustaría que los papás se hicieran más responsables. Está muy mal solapar los derechos del niño y de ahí se agarran, dónde queda la obligación de los papás. Quieren que los maestros hagamos el 100 por ciento del trabajo. Y si no te apoyan ni modo, me pagan para enseñarles pero sí se requiere del apoyo del papá".
"Estoy en contra de los golpes y de la agresión verbal, pero antes nos traían cortitos y los papás se sentaban con nosotros a hacer la tarea y ahora les dan toda la razón, un papá habla a Educatel y dice que le gritaron a su niño y pobre maestro, le dan la razón al papá aunque no la tenga", lamenta.
"Los papás de una escuela pública exigen mucho, piden peor que en un colegio. Los papás de un colegio en lugar de reclamar porque pagan no lo hacen, y en las escuelas públicas se les da toda la libertad a los papás que reclaman por todo", compara.
"Yo a veces quisiera decir que papá que no venga a la junta, no le voy a entregar la calificación, es una medida de que se hagan responsables, pero no se puede, hay que entregarle al papá a la hora que pueda o que quiera. Así cómo va a funcionar una escuela", se cuestiona.
La caja de recuerdos.
"Tengo una caja llena de muchas cartas, recados. Los niños tienen esa costumbre de mandar cartitas o recaditos a la maestra, diciendo que nos quieren mucho, o dependiendo de la fecha si es Navidad o tu cumpleaños. Eso es lo que a uno lo motiva, es satisfacción personal".
"Yo siempre le digo a mi hijo que cuando yo ya no trabaje, voy a sacar la caja y me voy a poner a leer todo lo que me escribieron. A acordarme de ellos. Es una caja grande, está llena las he guardado desde hace 24 años que empecé a trabajar".
LA MAESTRA
Nombre: Francisca Cuéllar Torres.
Edad: 40 años.
Triunfadora: Porque son los Mejores 2005. Categoría: Primaria. Cargo: Directora de la Escuela Pedro María Anaya, TM Plaza: Maestra en la Escuela 15 de Mayo TV Años de ejercicio: 24 años como maestra Estudios: Egresada de la Escuela Normal Básica, generación 83
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