‘Agua Saludable no avanza por corruptos caciques’, sentencia AMLO

TORREÓN, COAH.- Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, llegó al ejido San Jacinto ayer por la mañana para recorrer las obras del proyecto de Agua Saludable para La Laguna, donde afirmó que “los corruptos no dejan trabajar”.

Cuando llegó lo recibió un grupo de personas que piden justicia por el feminicidio de Gaby Quiroz a manos de su pareja, investigación que los familiares aseguran no avanza ante la Vicefiscalía del Estado. López Obrador recibió una carpeta donde le piden que se haga justicia.

Luego habló unos minutos con la prensa local asegurando que los laguneros “no pueden estar tomando agua contaminada y no pueden estar tomando agua con arsénico porque esto produce enfermedades, sobre todo para los niños”.

El presidente dijo que se hará el proyecto, si lo permite la gente, sobre todo los caciques, aseguró.

“Es un programa para beneficiar a la gente pero hay mucha politiquería y los corruptos no dejan trabajar”, aseguró y admitió lo que considera “mano negra”.

Señalando a si el proyecto avanzará, apuntó: “hay que insistir porque es en beneficio de la gente, todo se va a apoyar pero se tiene que ayudar porque hay mucho cacique aquí en La Laguna, cacique político y mucha gente corrupta, no el pueblo sino algunos gobernantes políticos y gente que están acostumbrados a saquear, a robar”, dijo Obrador.

En esta ocasión ya no se mostró firme sobre si la obra terminará en el 2023 pues ante la pregunta respondió: “Yo voy a hacer todo lo que esté de mi parte”, dijo López Obrador.

Sobre la necesidad de que se ejecute en beneficio de 9 municipios que representan a 1.6 millones de personas dijo: “No pueden estar tomando agua contaminada con arsénico que produce enfermedad, sobre todo para los niños, pero están los caciques políticos de La Laguna que ustedes conocen bastante bien. Voy a seguir insistiendo ahí”, acotó.

El caciquismo al que se refiere el presidente es una forma distorsionada de Gobierno local mediante la que un dirigente político tiene un dominio total de una sociedad del ámbito rural expresada como un clientelismo político. El término se aplica también a los pueden controlar el voto de sus clientes, por lo que pueden negociar con los políticos centrales y ser la cara o base del partido.