Madre torreonense pide justicia por el crimen de su hijo; denuncia corrupción y simulación en Fiscalía de Coahuila
COMPARTIR
TEMAS
Lo único que se observa en la Fiscalía General de Estado es corrupción, pérdida de evidencias, negligencia y simulación, dice la señora Norma Leticia Casas Valenzuela.
Justicia y el apoyo del gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, pidió la señora Norma Leticia Casas Valenzuela, por el homicidio de su hijo José Roberto González Casas, porque en la Fiscalía General del Estado, lo único que se observa es corrupción, pérdida de evidencias, negligencia y simulación.
José Roberto, quien tenía 18 años de edad, fue golpeado brutalmente el 20 de diciembre de 2016 en una posada de los empleados del bar “El Chalet”, celebrada en Encino 143 de Torreón Jardín, casa de Jorge Eduardo Cavanzón Estrada y Mónica Isabel Sifuentes, a donde la víctima asistió por invitación de su amiga Luisa Fernanda Márquez Estevané.
Los dueños de esa casa, en sus declaraciones manifestaron que lo estuvieron golpeando y haberlo dejado caer sobre el pavimento en varias ocasiones, sujetándole las manos hacia atrás, mientras los presentes se burlaban.
Como involucrados en el homicidio, además de Cavanzón Estrada y Mónica Isabel, aparecen Kevin Daniel Lozano Paz, Jorge Alberto de Diego Muñoz, Jesús Alejandro Chávez Soto, Luis Fernanda Márquez Estevané y Luis Antonio Gallegos de León.
Ya han pasado casi dos años del homicidio y tres delegados de la Fiscalía General del Estado Laguna 1, primero Gerardo Márquez Guevara, luego Jesús Jaso Fraire y ahora Hugo Morales, y ninguno de ellos ha dado respuesta, al grado que los implicados están siendo asesorados por el mismo personal de la Fiscalía en su defensa.
Personal de asuntos especiales de la dependencia acompañaron en algunas ocasiones a los presuntos responsables, asesorándolos al momento de hacer sus declaraciones.
Las evidencias también extrañamente se han extraviado, las fotografías que habían tomado del desorden en que encontraron el interior de la casa donde fue la posada y posteriormente afuera del domicilio.
El agente del Ministerio Público que recibió el caso fue Ramiro Castillo y después Basilio Amezcua, quienes simularon declaraciones y diligencias que nunca llevaron a cabo y es obvio que están protegiendo a quienes cometieron este crimen.
De la solicitud de que se aclare el caso y se haga justicia que le hicieron al gobernador, dice no han obtenido respuesta, por lo que han interpuesto una queja en la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Coahuila, pero en concreto no se ha aclarado este asunto.
La señora Norma Leticia manifiesta estar ya cansada de esperar justicia, por eso hace público el caso, luego de que la han traído a vueltas y vueltas, sin que le den solución.
Señala que es evidente la protección que los involucrados están recibiendo por parte de la Fiscalía General de Estado, tanto en declaraciones, como en diligencias.
Es por ello que solicitó al gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís apoyo para que se esclarezca el asesinato.
Pide se investigue con seriedad, se dejen ya de corrupciones los funcionarios de la Fiscalía General del Estado y si hay personas que tengan que pagar por este asesinato, que se haga.
Los nombres de los implicados, sus domicilios y números de teléfono, han sido investigados por familiares de la víctima, dado que la Fiscalía General del Estado, se niega a intervenir, al grado que justifican las inasistencias a declarar de los cómplices y no pasa nada.
El mandatario estatal ya tiene conocimiento de este caso, en virtud de que se le ha solicitado el apoyo, pero hasta el momento no ha dado una respuesta como jefe de Estado y responsable de la seguridad de los coahuilenses.