Considera Enrique Krauze a Chávez un "perturbador continental"
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El historiador consideró que "Chávez es un hombre anclado en los años sesenta, que se siente la encarnación de dos padres históricos: Bolívar (Simón) y Castro (Fidel), engendrado por ambos, pero que al mismo tiempo compiten. Si Bolívar fue el héroe del XIX y Castro del XX, él quiere ser el del XXI".
Bogotá, Colombia.- El historiador y ensayista mexicano Enrique Krauze dijo hoy a Efe que la compra de armas rusas anunciada por el presidente venezolano, Hugo Chávez, reafirma una vez más que éste "es un perturbador continental" que "busca conflictos" para distraer la situación interna de su país.
"Esto de Rusia es de miles de millones de dólares gastados, y lo que pueda pensarse es un capítulo más, por desgracia no el último, de su delirio", señaló Krauze, autor de un estudio crítico, "El poder y el delirio" (Tusquets, 381 páginas), sobre Chávez.
El presidente venezolano anunció recientemente que tiene previsto firmar, el próximo septiembre en Rusia, "un acuerdo importante de armamento" que, según fuentes de Moscú, incluirá carros blindados y tanques, aviones de combate, sistemas de defensa antiaérea, submarinos, buques y lanzaderas de misiles.
Para el autor mexicano, Chávez, con el argumento de las bases que usará Estados Unidos en Colombia, "buscó un conflicto internacional", cuando de lo que se trata es de una "cortina de humo necesaria para ocultar los tremendos problemas internos".
Krauze (Ciudad de México,1947), también ingeniero y quien se encuentra en Bogotá en la delegación de su país, invitado de honor, a la XXII Feria Internacional del Libro, añadió que, "a más inseguridad en Venezuela, mas proclividad de Chávez a inventar situaciones de guerra en el exterior".
Ante ello, instó a los colombianos a "tener mucha sangre fría" y a "hacer uso de toda la paciencia y malicia que han podido acumular en su historia para descontar los desplantes verbales (de Chávez) y ver lo que tienen de realidad", aunque advirtió de que "no dejan de ser peligrosos".
Krauze añadió que "quien verdaderamente está viendo y queriendo ver las señales de guerra es el propio Chávez (...), un hombre (..) con una mentalidad castrense en su sentido más primitivo".
El historiador consideró que "Chávez es un hombre anclado en los años sesenta, que se siente la encarnación de dos padres históricos: Bolívar (Simón) y Castro (Fidel), engendrado por ambos, pero que al mismo tiempo compiten. Si Bolívar fue el héroe del XIX y Castro del XX, él quiere ser el del XXI".
El ensayista explicó también que no le puso el título "poder y delirio de manera caprichosa" al libro que presenta en Bogotá, y explicó que "el poder absoluto lleva al delirio, y en el delirio no hay límite. El delirio abre la puerta a muchas otras formas cada vez mayores y más pronunciadas y desaforadas de delirio".
También en opinión de Krauze, "la historia produce alucinaciones cuando se digiere mal (...) y es el producto más peligroso del intelecto que hace soñar a los pueblos y los hace concebir ideas falsas, ideas caprichosas y torcidas de su destino".
En ese sentido, apuntó, Chávez "ha apurado la poción de la historia en dosis tan excesivas que se requerirá de las más complejas drogas de nuestras regiones para tener efectos similares. Él cree que puede llevar a cabo esa unidad que se parece menos a la de Bolívar, que fue un sueño del XIX, y se parece más a los nazis".
Para Krauze, Chávez cree que la historia "es un género derivado de su biografía y que Venezuela existe porque existe él".
Los anuncios de Venezuela de que ya no comprará a Colombia (autos, alimentos), según Krauze, "en principio afectarán" la unidad e integración regional.
"El elemento perturbador de la región, y es lo que no se había imaginado nadie hace diez años, es Chávez", insistió el también autor de "Siglo de caudillos" y "Biografía del poder".
"Yo creo que las democracias de este continente, tanto la de Colombia como la un poco más de izquierda o liberal de Chile o de Brasil, tienen que hacer acopio de sabiduría y de paciencia; no entrar en las provocaciones verbales", puntualizó Krauze.
En la entrevista, Krauze también confesó tener "la mejor opinión de Alvaro Uribe, pero no de su búsqueda de una nueva reelección".
La reelección, anotó, "empobrece a la sociedad que la concede o la busca, parece una dimisión, la aceptación de que no puede haber más hombres que el hombre necesario, y que los nuevos liderazgos no son suficientes para hacerse cargo de un país".
Krauze anticipó que en septiembre próximo publicará "un ensayo sorpresa y que atañe a Colombia".
Es, concluyó, "un tema que interesará a los colombianos".
