Novak Djokovic gana batalla judicial para quedarse en Australia... pero aún podrían deportarlo
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El tenista serbio fue liberado de inmediato de la detención de inmigración pero aún no canta victoria
Novak Djokovic fue liberado inmediatamente de la detención de inmigrantes en Australia luego de que el tribunal de circuito federal ordenó que se anulara la decisión de cancelar su visa.
El juez Anthony Kelly leyó un minuto de consentimiento acordado entre el tenista número uno del mundo y la ministra de Asuntos Internos, Karen Andrews.
“Estoy complacido y agradecido de que el juez revocara la cancelación de mi visa. A pesar de todo lo que ha pasado, quiero quedarme e intentar competir en el Abierto de Australia”, escribió el tenista en Twitter.
Sin embargo, tan pronto como el juez de circuito federal Anthony Kelly reveló que el Ministro del Interior había accedido a resolver el caso, el abogado del gobierno australiano advirtió que el Ministro de Inmigración aún podía decidir usar un poder personal para cancelar la visa de Djokovic nuevamente.
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Eso significa que Alex Hawke, uno de los aliados políticos más cercanos del primer ministro Scott Morrison, ahora tiene que tomar una decisión política trascendental: dejar que Djokovic se quede y juegue por un récord número 21 en el título de singles de Grand Slam; o deportarlo, lo que viene con una fuerte prohibición de volver a ingresar a Australia durante tres años.
Djokovic obtuvo una exención sobre la base de que había contraído recientemente COVID-19, que según el juez había satisfecho a un médico calificado y a un panel independiente establecido por el gobierno de Victoria.
En medio de una ola creciente de casos de Ómicron, la idea de que una persona no vacunada pueda representar una amenaza parece ridícula, pero la Ley de Migración está diseñada para permitir que el gobierno deporte primero, y reflexione sobre la proporcionalidad después.
