Festeja Cristina Pacheco los 30 años de "Aquí nos tocó vivir"
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<strong>México, D.F.</strong> .- El programa de televisión "Aquí nos tocó vivir", que se transmite por Canal Once, sigue vivo y fresco, no se ha descompuesto o estancado porque sigue siendo para las personas un álbum de familia y un espejo donde encontrarse y donde mirarse, afirmó anoche su conductora, Cristina Pacheco.
En el festejo por los 30 años de la producción, en un restaurante del Centro Histórico de esta ciudad, la periodista y escritora aseguró a Notimex que para ella cada programa es especial, por lo que no habrá una transmisión de ese orden por el aniversario.
"Cada uno de ellos es tan especial porque cuando empezó este proyecto uno no piensa, uno no sabe cómo será el final de una historia, nunca se sabe, pues pudo haber sido un programa o 50, y la vida fue corriendo y éste fue creciendo con la vida y se fue haciendo solo", expresó.
Explicó que los temas o contenidos de su programa muchas veces se plasman a través del instinto, y puso por ejemplo que al pasar or una casa cualquiera ella ve, "siente" algo que sabe puede salir algo interesante.
"También ha ocurrido que alguien pasa por la calle y esta persona tiene que decir algo, y me ha pasado tantas veces que es maravilloso", expresó la escritora, autora de títulos como "Sopita de fideos", "Zona de desastre" y "Dos pequeños amigos", entre otros.
Subrayó que la gente no habla con filosofía, sino con sabiduría, con valor y entusiasmo, "siempre hay una persona que dice `tenemos que salir adelante, aun en las condiciones más adversas'".
Un total de Mil 800 programas y especiales y más de nueve mil horas de producción ha contabilizado "Aquí nos tocó vivir" desde su primer transmisión, dedicado a la zona Lomas de Zaragoza, al que siguió uno sobre el Templo Mayor.
Por la pantalla del canal del Instituto Politécnico Nacional han pasado también producciones sobre el Panteón Civil de Dolores, los Tiraderos de Santa Cruz Meyehualco, el Teatro Blanquita, uno sobre el escritor José Revueltas o Ciudad Nezahualcóyotl, entre otros.
De manera ininterrumpida en estas tres décadas al aire, el programa ha recogido las voces de los mexicanos menos favorecidos, quienes no habían tenido otra forma de expresar sus sentimientos, sus vivencias y su problemática.
"Aquí nos tocó vivir" es un espacio único en la televisión mexicana, donde no hay cuestionarios ni guiones, sino conversaciones; no hay escenografías sino espacios reales.
Tampoco hay personajes, sino personas que tienen un nombre, un rostro y una historia que contar, y cuyos protagonistas serán siempre los mismos: hombres, mujeres y niños de México.
A lo largo de este tiempo el programa ha estado presente en los primeros asentamientos en la periferia del Distrito Federal, lugares sin pavimentar, sin servicios públicos, sin escuelas, sin clínicas ni mercados.
Cristina Pacheco, y el público televidente, ha sido testigo de tragedias como la explosión de San Juanico, el incendio en el mercado de Ampudia en La Merced, el sismo de 1985 y su seguimiento, con los habitantes que aún viven en campamentos.
Tampoco han faltado los jóvenes y niños discapacitados, quienes demuestran su energía y ganas de vivir; menores en espera de una donación de órganos o desahuciados, entre otros muchos temas-historias.
"Aquí nos tocó vivir" ha dado cuenta de las mujeres llamadas "sexo servidoras", de las madres solteras, de las que se quedan solas para cuidar a sus hijos, mientras el hombre marcha al norte del país en busca de una mejor oportunidad para vivir.
La escritora y periodista, cuyo nombre real es Cristina Romo Hernández, nació en Sa Felipe Torresmochas, Guanajuato, en 1941, y en la Universidad Nacional Autónoma de México estudió la carrera de Letras Españolas.
Inició su carrera periodística en 1960 y desde entonces ha colaborado en medios como "El Popular", "Novedades", "Sucesos", "Siempre!", "El Sol de México", "El Día" y La Jornada, entre otros.
Casada con el poeta José Emilio Pacheco, como escritora ha publicado títulos como "Para vivir aquí", "Orozco", "Iconografía personal", "Sopita de fideo", "Testimonios" y conversaciones", "Zona de desastre", "Cuarto de Azotea" y "La luz de México".