Inter y Roma se juegan el scudetto en el último partido de Liga

Aunque ocurre menos veces de las deseadas, un final de suspense como el de este domingo es el sueño cumplido de los aficionados y las televisiones con derecho de retransmisión.

Este final de infarto se produce porque en la última fase de la temporada el Inter se ha desinflado, mientras que el Roma se ha mantenido más estable.

Los milaneses tienen una ligera ventaja, van un punto por delante, lo que les da la tranquilidad de saber que todo lo que ocurra depende de ellos.

Los romanistas, en cambio, sólo tienen una posibilidad ganar y esperar que el Inter empate o pierda: cualquier otro resultado del Roma no vale para ganar la Liga, pues aún un empate suyo y una derrota de los negrirojos significaría su triunfo final.

Hasta ahí las matemáticas; después las decisiones de terceros que pueden influir en el juego, como la del prefecto de Catania que prohibió la presencia de "tifosi" romanistas debido a los precedentes de disturbios entre ambas hinchadas.

Tampoco los tendrán los del Inter, porque aunque el prefecto de Parma está "seguro" de que las aficiones de los dos equipos "iban a ser correctas", ha decidido que no puedan estar, en un acto de supuesta "igualdad de condiciones".

Otra decisión que planeará sobre el Inter es la publicación hoy de las conversaciones telefónicas mantenidas por su técnico, Roberto Mancini, y algunos de sus jugadores, como Marco Materrazi, con Domenico Brescia, un hombre con antecedentes penales y supuesto aliado de la 'Ndrangheta, la mafia de Calabria, en el sur de Italia.

Según la prensa, los Carabineros (policía militarizada) interceptaron una serie de conversaciones entre Brescia y los "neroazzurri" durante una investigación sobre tráfico de drogas.

Y aunque ninguno de los miembros del club es investigado, ya que en las conversaciones interceptadas se hablaba sólo de la compra de estos artículos de lujo, saber que la Policía escucha las conversaciones de uno con un delincuente no tranquiliza.

Para compensar la presión de unos y elevar la moral de otros, el Inter ofrece una prima de 250.000 euros a sus jugadores y el Roma otra de 200.000.

Hasta ahí lo extradeportivo; después llega lo que de verdad tiene que ver con el juego: las alineaciones, las tácticas y los rivales.

Luciano Spalletti, el técnico del Roma contará con su once titular, salvo precisamente su guía espiritual y también material, Francesco Totti, lesionado hasta fin de temporada.

Pese a esa ausencia, el Roma, que ganó al Catania 2-0 en la primera vuelta, ha conseguido continuar la caza del Inter y lograr la situación actual.

El Inter, que ganó al Parma 3-2 en la primera vuelta, espera aún para saber si puede contar con el lesionado Ibrahimovic, que esta semana se ha entrenado con el equipo, lo que indica que Mancini tiene ganas de jugar con él.

Pero también los rivales cuentan y mucho en este caso, porque ambos se juegan la permanencia en la primera división: el Parma esantepenúltimo y está en zona de descenso, mientras el Catania, cuarto por el final, está sólo a dos puntos, por lo que ambos se juegan no bajar a la Serie B.

Ante esa tensión por el primer puesto, la de los tercero, cuarto, quinto, sexto y séptimo, es decir, los que tendrán derecho a la fase previa de la Liga de Campeones o acceso a la UEFA, pasa a un segundo plano, aunque estará presente sobre todo para un Milán cuyas figuras pueden no estar interesadas en seguir en un equipo que no juega en la primera división europea.