Presidenciables: pese apoyo de AMLO, Sheinbaum no crece frente a Ebrard y Monreal
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La estatura política de Sheinbaum, no crece pese al impulso de AMLO ante algunos de sus adversarios, semi oficiales como Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal y Adán Augusto López
Claudia Sheinbaum aún no crece lo suficiente frente a otros aspirantes a la candidatura presidencial de Morena, así que la estrategia está haciendo agua y Andrés Manuel López Obrador está perdiendo el control del proceso que detonó.
De acuerdo con la columna de Raymundo Riva Palacio, publicada por Vanguardia, el golpe es la estatura política de Sheinbaum, no crece pese al impulso de AMLO ante algunos de sus adversarios, semi oficiales como Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal y Adán Augusto López.
Sheinabum es la candidata designada hasta este momento pero su debilidad puede convertirlos en rivales reales.
Añade que Ebrard comenzó informalmente su camino a la candidatura en julio del año pasado, cuando reunió a 100 colaboradores en una comida para informarles su decisión, que fue el punto de partida para que se crearan diversos grupos de trabajo que fueran construyéndola.
Monreal no tiene acceso directo con el Presidente, ha utilizado el conducto del influyente secretario particular de López Obrador, Alejandro Esquer, para hacerle llegar el mensaje de su deseo de verlo para exponerle su determinación a buscar la candidatura presidencial de Morena.
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AMLO parece haberse dado cuenta que la sucesión tutelada desde la mañanera, ya no le alcanza para evitar fisuras internas que se podrán convertir en fracturas.
Riva concluye mencionando que AMLO pretende una sucesión tutelada, incluso provocando a la oposición al enlistar a sus posibles candidatos para la Presidencia.
No le alcanza para imponer el candidato de la oposición, y tampoco está claro si le alcanza para evitar las fracturas en Morena y, por consiguiente, la diáspora de facciones del partido hacia las candidaturas de los aspirantes.
Hasta ahora, Sheinbaum mantiene el respaldo del voto duro de López Obrador, pero la jefa de Gobierno capitalina no crecerá más, por lo que el Presidente tiene que tomar el control del partido, como lo hará, e instalar los frenos a los aspirantes.