Los aparatos ideológicos de la 4T (1)
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¿Cómo intenta la 4T apropiarse de las mentes de las personas para dominarlas de maneras sutiles pero efectivas? ¿Cómo pretende edificar una hegemonía cultural o ideológica sobre las mayorías mexicanas? ¿Cómo controlaría la 4T “el sentido común” de las mismas –cargado de desinformación, prejuicios y medias verdades? ¿Cómo reprimiría la 4T la disidencia de las personas críticas a su proyecto?
En el mejor estilo del marxista ortodoxo de los años 70, que preñó la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM, alma mater de AMLO, éste sigue a pie juntillas al marxista Louis Althusser (1918-1990), con su concepto de aparatos ideológicos de Estado, y al también filósofo marxista Antonio Gramsci (1891-1937), con su concepto de hegemonía cultural o ideológica.
La relación entre ambos conceptos es sencilla de explicar: el funcionamiento adecuado de los aparatos ideológicos edifica –de manera cotidiana– la hegemonía cultural del régimen de la 4T.
Dicha hegemonía no implica una subordinación violenta o una dominación impuesta desde el Estado; por el contrario, la misma es definida y reproducida desde “el sentido común” compartido en la cotidianidad por la mayoría de la gente. La disidencia a ese poder hegemónico, sin embargo, es reprimida hasta desaparecerla.
Los aparatos ideológicos son, desde la perspectiva de Althusser, los siguientes:
1.- El aparato ideológico religioso: La 4T marcó su raya con la Iglesia Católica al llegar al poder. Desde ese momento, AMLO privilegió su relación con las Iglesias Cristianas –Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas– para “gobernar con la Biblia” y fundar “la Divina Cuarta Transformación” por ser una opción religiosa creciente entre las clases populares y campesino-indígenas.
AMLO estableció una relación estratégica con ellas: armó dos partidos políticos de corte cristiano (Partido Encuentro Social, y cuando éste perdió su registro, fundó el Partido Encuentro Solidario); distribuyó a través de sus feligreses “La Cartilla Moral” casa por casa a lo largo y lo ancho del país y empezó a gestionar concesiones de radio y TV para ellos.
2.- El aparato ideológico educativo: Este es un aparato medular porque impacta en la educación de 37 millones de niños y jóvenes que reciben educación básica y secundaria en el país.
Los recientes cambios modelados a imagen y semejanza del modelo de la 4T son los siguientes: Los grados escolares –tres de preescolar, seis de primaria y tres de secundaria– serán sustituidos por seis fases que agruparán a todos los niños. La 4T realizó asambleas (con docentes, autoridades educativas, académicas y académicos, habitantes de pueblos indígenas afroamericanos, personas de otras secretarías, etcétera) para cambiar planes y programas que vienen en los libros de texto gratuitos, es decir, se actualizaron los contenidos de lo que van a enseñar los profesores y a aprender los alumnos en línea con el pensamiento o ideología de la 4T. La 4T propone la educación “bajo compartencias: ‘Educar para compartir’”, desde donde se “aprende para la comunidad, las madres y padres participan de manera activa, se educa con enfoque de género y con una visión de sostenibilidad”.
Continuará...