Otros obstáculos para la libertad de expresión
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La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) señaló en su informe sobre las Tendencias Mundiales de la Libertad de Expresión y Desarrollo de los Medios de Comunicación que la pandemia por COVID-19 “ha dado un golpe duro para los ya tambaleantes cimientos económicos de la industria de los medios de comunicación”.
Los problemas financieros que están teniendo los medios de comunicación comprometidos con un periodismo libre e independiente, cada día, enfrentan mayores retos para la difusión de contenidos de calidad.
El informe, elaborado por expertos internacionales tanto en desarrollo como en libertad de expresión, advierte que “si no se realizan intervenciones importantes, las sociedades se enfrentarán a un descenso masivo de la oferta de noticias como servicio esencial para la toma de decisiones informadas”. Esta situación impactará de manera importante en la forma en la que la ciudadanía puede demandar un ejercicio de rendición de cuentas al poder público.
Según el informe de la UNESCO, en los últimos cinco años, los ingresos publicitarios de los periódicos se redujeron a la mitad. En contraste, Facebook (hoy grupo Meta) y Google reciben más del 50 por ciento de las ganancias obtenidas por publicidad digital a nivel mundial. Esta condición ha provocado que muchas redacciones disminuyan de forma drástica su plantilla de personal o incluso tengan que cerrar.
Asimismo la investigación señaló que el número de los usuarios de las redes socio digitales casi se ha duplicado, del 2016 a 2021. Es decir, tenemos más voces dando puntos de vista y con ello, mayor acceso a contenidos. Pero se ha observado una disminución en la circulación de materiales periodísticos de calidad y sustentados en hechos reales, derivado de la aplicación de los algoritmos.
En septiembre de 2020, los investigadores identificaron más de 1 millón de tweets con información inexacta, poco confiable o engañosa relacionada con la pandemia. Más de 100 organizaciones de verificación de datos y medios de comunicación desacreditaron hasta mil 700 afirmaciones falsas por mes relacionadas con la pandemia.
En conclusión, los medios de comunicación enfrentan grandes retos para mantener su base laboral y también garantizar calidad en sus contenidos informativos. Aquellas empresas con un compromiso auténtico por su comunidad y el fortalecimiento de la democracia deben comenzar a replantearse sus actuales canales de financiamiento y explorar nuevas formas del modelo de negocio.
Ahora la libertad de expresión no sólo pende de un hilo por la violencia que se ejerce contra las personas dedicadas al periodismo. A nivel global, la concentración de los recursos económicos de las grandes plataformas digitales que dejan en desventaja a los medios de comunicación tradicionales se han convertido en un obstáculo difícil de vencer.