Ella es la maestra que, a base de disciplina, tesón y creatividad, ha conseguido formar a cientos y cientos de estudiantes en al arte del diseño gráfico, imponiendo su propia marca en el desarrollo de nuevos talentos que año con año salen al mercado laboral de todo el mundo
- 15 diciembre 2024
Después de 28 años de estar frente a grupo en las aulas de la Universidad Americana del Noreste, (UANE) Ana Laura Cepeda Villanueva, está convencida de que no se equivocó al haber entregado más de la mitad de su vida a la docencia.
Ana Laura no una simple maestra de diseño gráfico, ha sido y es, literalmente, la diseñadora del futuro de cientos y cientos de estudiantes, de decenas y decenas de generaciones, que han pasado por su cátedra.
Aquellas muchachas y muchachos que todos los días entraban a clase con Ana Laura a las 7:00 de la mañana, frescos de su mente, y que ahora han conseguido, por sus elevados conocimientos en el diseño, colocarse en prestigiosas empresas de publicidad y de medios de comunicación en Europa, Canadá, Estados Unidos, México y por, supuesto, Coahuila.
“La verdad me siento con mucho orgullo al saber que muchos ex alumnos trabajan en medios que van relacionados con el diseño gráfico, ya sea agencias de publicidad, como freelance, en periódicos, en empresas privadas, en gobierno. Me siento muy satisfecha cuando me los encuentro en la calle, en el súper, en el cine, en todos lados y que me digan ‘miss, gracias a usted aprendí mucho y obtuve un trabajo en tal parte’”.
Al mismo tiempo que Ana Laura formaba a sus alumnos en el arte de crear empaques vistosos, atractivos, para todo género de productos, los inspiraba, y sigue inspirando a salir al mundo del mercado laboral empacados con las etiquetas del liderazgo, el trabajo, la puntualidad, la responsabilidad, la organización, el orden, la paciencia y la cortesía.
Valores que Ana Laura había aprendido desde niña, allá cuando trabajaba en una empresa familiar, que significó sus inicios y ahora significa su gran preparación en el ámbito del diseño gráfico.
Su abuela materna y un hermano de su madre tenían un taller llamado Manufacturas Villanueva (MAVISA), en el que se maquilaban los escudos para las escuelas y se diseñaban ceniceros, acrílicos, banderines, playeras, etcétera, el lugar donde Ama Laura haría sus pintos durante sus vacaciones veranos.
“Me ponían a trabajar con el dibujante, con las muchachas que imprimían las playeras, entonces aprendí mucho de ese oficio. Le preguntaba al dibujante que qué carrera podía estudiar para seguir aportando al negocio y me dijo diseño gráfico”.
A Ana Laura, como los cientos y cientos de sus pupilos, le había tocado estar sentada en un butaca de una universidad, la Universidad de Monterey, (UDEM), y nutrirse de los conocimientos de mentores como la maestra Mariana Garza y otra profesora Liz, que le dejaron una huella imborrable, la huella que más tarde caracterizaría su estilo propio de enseñar.
“Me acordaba mucho de cómo impartían sus clases, como asesoraban y lo fui haciendo. Ya en cierto momento tuve mi propio estilo”.
Ana Laura se define como una maestra exigente, perfeccionista, al que le gusta que sus alumnos entreguen proyectos de calidad.
“Esto es un amor apache, como me lo han dicho muchos compañeros, subdirectores, rectores. Soy exigente en el aula, sí, regañona, me gusta que me hagan caso”.
En un principio Ana Laura había dudado en convertirse en profesora, consciente que para esta carrera de formar persona se requiere más que un don,
“Ni me imaginé dedicarme a la docencia. Al principio pensé que no me iba a gustar, no me sentía como que capaz de ser docente y pos veme aquí, ya llevo 28 años y ahora ya soy hasta subdirectora académica”.
Cumbre que alcanzó inspirada en la labor de grandes mentores de UANE como el fallecido maestro Adolfo Olmedo, Rosa Guadalupe López, Mercedes de Luna, Alejandro Coronado, entre otros, que a Ana Laura le sirvieron como un modelo, un patrón, en eso de forjarse como una docente de excelencia.
Comenzó impartiendo una materia en la entonces Universidad Autónoma del Noreste. Años más tarde y gracias a su desempeño la invitaron a incorporarse de tiempo completo.
Su perseverancia, tesón, disciplina y amor a su oficio de enseñar, le han valido con el tiempo ocupar la subdirección de las carreras de diseño gráfico, arquitectura y comunicación en UANE desde hace 16 años.
“Soy de los subdirectores con más antigüedad, creo que soy de los más antiguos de UANE en todos los campus. Llevó más de 16 años como subdirectora académica”.
Un cargo en el que tiene bajo su responsabilidad a 400 alumnos.
En dos ocasiones, 2016 y 2014, le han dado la oportunidad de formar parte del equipo para diseñar los contenidos y el mapa curricular de la carrera de diseño gráfico.
Y ello le ha permitido ser la impulsora de nuevas experiencias académicas como vistas a medios de comunicación de renombre y eventos extracurriculares, llámese exposiciones y congresos internacionales, que abonan a la formación profesional de sus estudiantes.
“Me preocupo mucho porque los alumnos vivan experiencias propias de sus carreras”.
Ana Laura ha entregado tanto en las aulas como maestra, que dice que de tanto dar siente que ya se le cansó el caballo.
Con todo y eso se sigue capacitando sobre métodos de cómo ser mejor docente frente a grupo, nuevas tecnología y programas académicos innovadores, y no se resigna a renunciar a su pasión más grande que es la enseñanza.
“Es muy importante estar actualizado para estar frente al aula, para entender a las nuevas generaciones”.
Por eso se mantiene activa, y muy activa coachando a sus muchachos en la materia que más le llena, Proyecto de Evaluación Final, y que es poner en práctica todo lo aprendido en cuatro años y medio de carrera.
“En un proyecto con un cliente real de la localidad y que a los alumnos les sirve de portafolio para futuros empleos. Es una satisfacción de ver la alegría cuando los presentan en un evento al que invitan a sus familias, al cliente”.
Uno de sus logros más grandes es que ha formado y sigue formando alumnos en la docencia dentro, particularmente, del diseño gráfico.
“De ellos he aprendido a valorar lo que hacen en la actualidad, me lleno de satisfacción cuando veo el éxito de algún proyecto desarrollado por ellos a nivel nacional e internacional. Los invito a dar conferencias y para mí el que las nuevas generaciones vean lo que han hecho alumnos de otras generaciones que estudiaron en UANE Saltillo es... cállate, me lleno de orgullo”.
Sin duda que han sido para Ana Laura 28 años de una aventura gratificante y divertida, que la ha posicionado como una de las mejores marcas de UANE en Saltillo y todos sus campus.