Lupina Soto nació en 1918, falleció en 2022, estuvo con nosotros más de un siglo y su huella aún está visible en las tablas saltillenses. María Guadalupe Treviño Morales, inmortalizada como Lupina Soto, vivió hasta los 104 años de edad y hasta en sus últimos años conservó una mente aguda, una memoria envidiable y una elocuencia que, combinada con la potencia de su voz, todavía podía dominar cualquier espacio en el que se encontrara.
Su vida sobre las tablas empezó tarde, después de haberse jubilado como enfermera en 1963, pero estuvo bajo el ala de Lourdes Valdés y Carmen Aguirre de Fuentes, pioneras del teatro en Saltillo. Con ellas aprendió a desenvolverse sobre la escena y a dirigir, lo que haría también en un par de ocasiones a lo largo de su trayectoria.