Exhibe Carlos Reygadas el fracaso de los mitos mexicanos

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/ 22 septiembre 2015

    Con "Este es mi reino", Carlos Reygadas revisa las actitudes de diversos personajes anónimos a través de una fiesta

    México, D.F..- Un charro robándose a una mujer y un enmascarado en plena fiesta; extranjeros compartiendo con mexicanos; gente de distintos estratos sociales tomando alcohol, unos junto a los otros; un vehículo quemado por revoltosos y un hombre haciendo de sus necesidades enfrente de muchas personas.

    "Es una idea de toda la vida: cuando uno está en cualquier tipo de reunión en México se ve la variedad de orígenes, la manera de pensar en el mundo", dice Carlos Reygadas a EL UNIVERSAL.

    "Finalmente es una idea de comunión, de objetivos comunes, variedad en el estilo de vida, con todas sus virtudes y ventajas, y siento que tanto la Revolución como la Independencia son realmente un producto humano que respondía a esta descripción.

    "Sentí que con hacer una simple comida, con toda esta variedad, íbamos a ver la simple convivencia de cómo somos hoy. En la Revolución había cosas desorganizadas, nadie sabía bien qué hacía, algunos controlaban la situación a su beneficio y había algo de romántico que tiene que ver con la capacidad", agrega el cineasta.

    Así habla Reygadas de su cortometraje "Este es mi reino", que integra el largometraje "Revolución", que llega a la pantalla grande y chica el sábado, además de ser estrenado casi simultáneamente en YouTube por unas horas.

    El cortometraje se ubica durante una reunión de campo en la que se ve la riqueza y pluralidad del país en todos los aspectos. Toda la gente que aparece en él son amigos del director de "Luz silenciosa", ganadora en Cannes 2007 y "Batalla en el cielo".

    Se filmó en Tepoztlán durante 12 horas. Desde dos de la tarde, hasta las dos de la madrugada, tal y como pasa en una fiesta real.

    "Los que aparecen son un reflejo de la gente que conozco, de todos los que se han cruzado en mi vida. Una de las razones por las que le puse el título `Este es mi reino', es no sólo por ser gente mía, sino porque así es el país", explica.

    Fotógrafos de lujo

    En esa comida había más de 10 cámaras filmando a la gente mientras platicaba. Las mismas fueron dirigidas por Amat Escalante (`Sangre'), Alexis Zabe (`Temporada de patos'), Pedro González Rubio (`Toro negro') y Jaime Romandía (`Productor'). Y contra lo que pudiera pensarse, asegura Carlos, nada de lo que se ve en pantalla estuvo planeado, todo fue dándose sobre la marcha.

    "A todos les dije que se comportaran como quisieran. El que aparece con una máscara es un amigo al que le encanta el teatro, el performance, y quería hacer una luchita. Otro deseaba llevar una guitarra o decir un poema.

    "Con el coche sabía que había cierto peligro, pero hablé con mi amigo que era el dueño y me dijo que no había problema, que ya estaba medio chafita. El caballo aparece porque unos vecinos de Santa Catarina, en Tepoztlán, les pareció padre ir por él y aparecer, así se fue haciendo todo. Se filmó la que pasaba y listo", comenta.

    "Revolución", del que forma parte "Este es mi reino",se estrenó mundialmente en el festival de cine de Berlín.
    Reygadas acaba de llegar de Tucson, Arizona, donde también fue bien recibido: "Hay quien daría un mala lectura de que el corto es pesimista, pero es una lectura de lo que pasa, una especie de aceptación de que estamos viviendo una cosa de fracaso total.

    "No es algo de romper cosas, sino de aceptar internamente que nuestros mitos han fallado, de que es tiempo de que el régimen acepte su fracaso y dejarnos de demagogia, pensando en que podemos hacer trabajo personal", dice.

    Un cineasta nada común

    Lo tradicional no va con él. Carlos Reygadas utiliza no-actores para sus películas, si alguien le pregunta qué piensa del Oscar, dice que lo tiene sin cuidado, que prefiere los aplausos en certámenes de cine. Por eso no promocionó "Luz silenciosa" cuando iba a ser elegida como candidata a aspirar a una estatuilla.

    Siempre ha sido así. Imprevisible, si es que se le puede poner un calificativo rápido. En la primaria podía pasar de ser el bromista del salón a ser el alumnos de mejores calificaciones.

    O cuando salía de excursión se extasiaba con la naturaleza, tal y como ahora lo hace profesionalmente.

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