Localizan en México posible cementerio prehispánico maya

Círculo
/ 23 septiembre 2015

    En el lugar se ubicaron 66 restos depositados en urnas funerarias de barro y otros 50 alrededor de éstas.

    México, D.F..- Arqueólogos mexicanos hallaron 116 entierros de más de 1.000 años de antigüedad en la periferia de la zona arqueológica de Comalcalco, 2,8 kilómetros al norte de la acrópolis de esta zona del estado de Tabasco, en lo que se presume corresponde a un cementerio prehispánico maya.

    El Instituto Nacional de Antropología e Historia aseguró en un comunicado difundido hoy que el hallazgo "es la muestra esquelética más grande recuperada en la región noroccidental del área maya".

    Según la institución, los depósitos funerarios fueron localizados debajo de tres montículos de tierra que habían sido arrasados previamente por actividades agrícolas.

    En el lugar se ubicaron 66 restos depositados en urnas funerarias de barro y otros 50 alrededor de éstas.

    "Posiblemente, los 66 hallados en las urnas corresponden a individuos pertenecientes a la elite maya y los 50 restantes, que fueron acomodados en diversas posiciones alrededor y al pie de ellas, a sus acompañantes", comentó el arqueólogo Ricardo Armijo, coordinador de las labores de salvamento arqueológico.

    Además de los restos, en la zona se encontraron silbatos y sonajas de cerámica que representan tanto a animales como a hombres y mujeres ricamente adornados, decenas de navajas, cuchillos y desechos de talla de pedernal y obsidiana, múltiples fragmentos de metates, y más de 70.000 tepalcates (pedazos de barro).

    "El análisis preliminar de estos materiales sugiere que los entierros tendrían entre 1.161 y 1.200 años de antigüedad, ya que corresponden al periodo Clásico Terminal (750-850 d.C.), aunque todavía falta efectuar estudios exhaustivos que lo confirmen", añadió Armijo.

    Sobre la investigación, el antropólogo físico Stanley Serafín dijo que se harán análisis de huesos y de ADN con los que se determinará la edad, sexo, patrones patológicos, alimenticios y genéticos de las personas allí enterradas.

    "Estos nos ayudarán a saber si hay individuos externos a la región de Comalcalco o si estaban enfermos o desnutridos y a su vez esto nos permitirá interpretar el tipo de rituales que se hizo con ellos", precisó.

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