Remodela Zapatero a su gobierno
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Zapatero decidió repartir los cargos que Rubalcaba acumulaba hasta ahora -vicepresidente primero, ministro del Interior y portavoz del Ejecutivo- y reducir de tres a dos el número de vicepresidencias.
Madrid, España.- Dos días después de que Alfredo Pérez Rubalcaba fuera proclamado candidato del Partido Socialista (PSOE) a las elecciones generales previstas para 2012, el jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, remodeló hoy su Ejecutivo para sustituir al que hasta ahora era su hombre fuerte en él.
Zapatero decidió repartir los cargos que Rubalcaba acumulaba hasta ahora -vicepresidente primero, ministro del Interior y portavoz del Ejecutivo- y reducir de tres a dos el número de vicepresidencias.
La cartera de Interior la asume Antonio Camacho, de 46 años, que como secretario de Estado de Seguridad desde 2004 era hasta el momento el número dos de Rubalcaba en el Ministerio.
Cuenta con una "dilatada trayectoria" en "un ministerio que ha cosechado grandes éxitos en la lucha antiterrorista", dijo Zapatero en la rueda de prensa en La Moncloa en la que hizo el anuncio. "Tiene un perfil muy adecuado".
El ministro de Fomento desde 2009, José Blanco, suma a ese cargo el de portavoz del Ejecutivo. Persona muy cercana a Zapatero, a partir de ahora será él quien comparezca ante los periodistas los viernes tras el consejo de ministros.
"Conoce la acción global del gobierno y tiene una confianza directa conmigo, muy trabada durante mucho tiempo", dijo de él Zapatero. Blanco es además vicesecretario general del PSOE.
Para la recta final de su acción de gobierno, que terminará en marzo de 2012 si no convoca elecciones anticipadas, Zapatero decidió reducir las vicepresidencias de tres a dos.
Así, la ministra de Economía y vicepresidenta segunda, Elena Salgado, pasa a ser vicepresidenta primera y será la que presida el consejo de ministros en ausencia de Zapatero. El hasta ahora vicepresidente tercero y ministro de Política Territorial, Manuel Chávez, queda como vicepresidente segundo.
Zapatero evitó hoy de nuevo decir si, como se viene especulando, habrá un adelanto de las elecciones generales. "El gobierno sigue trabajando a pleno rendimiento", dijo. "Tenemos que trabajar pisando el acelerador, sobre todo en lo que respecta a la situación económica y financiera", aseguró.
El opositor Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy, al que todas las encuestas dan desde hace tiempo una holgada victoria en los próximos comicios generales, interpretó los cambios gubernamentales como "más de lo mismo".
"Los españoles quieren un gobierno nuevo para salir de la crisis", insistió la secretaria general del partido, María Dolores de Cospedal, instando de nuevo a Zapatero a anticipar los comicios.
De cara a esas elecciones, a las que Zapatero renunció a presentarse, Rubalcaba, de 59 años, es la baza con la que el PSOE pretende dar la vuelta a los sondeos. Y pretende hacerlo recuperando para el PSOE un discurso más a la izquierda, según dejó claro el sábado, en su proclamación como candidato oficial.
Los ciudadanos han castigado a los socialistas por la gestión que el gobierno de Zapatero ha hecho de una crisis económica de la que España aún no ha logrado salir y que ha dejado casi cinco millones de desempleados. Ese castigo se vio ya en las elecciones municipales y autonómicas de mayo, en las que los socialistas perdieron casi todo su poder territorial.
La de hoy es la novena remodelación del Ejecutivo que lleva a cabo Zapatero desde que llegó a La Moncloa por primera vez, en 2004. El jefe del gobierno comunicó al rey los cambios en el gobierno el pasado miércoles, según explicó él mismo, y el domingo los consultó con Rubalcaba, el flamante candidato socialista a la jefatura del Ejecutivo.