Da Vinci utilizó a una mujer y un hombre como modelos de La Gioconda
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Esa es la tesis presentada por Silvano Vicenti, responsable de la investigación que llevó al descubrimiento de la tumba de la Mona Lisa en el convento de Santa Orsola de Florencia.
La Gioconda o Mona Lisa, el célebre cuadro de Leonardo Da Vinci (1452-1519), tuvo como modelo a Lisa Gherardini del Giocondo, así como a Gian Giacomo Caprotti, conocido como “El Salai” y pupilo predilecto del maestro florentino.
Esa es la tesis presentada por Silvano Vicenti, responsable de la investigación que llevó al descubrimiento de la tumba de la Mona Lisa en el convento de Santa Orsola de Florencia y presidente del Comité Nacional para la Valorización de los Bienes Históricos, Culturales y Ambientales.
En un encuentro con los medios, Vicenti confirmó que para pintar su famoso cuadro, actualmente custodiado en el Museo del Louvre de París, Leonardo se sirvió de dos modelos.
Uno fue una mujer, Lisa Gherardini (1479-1542), miembro de la nobleza florentina y tercera esposa del comerciante Francesco del Giocondo, con quien tuvo seis hijos.
El segundo modelo fue un hombre, Gian Giacomo Caprotti, alias “El Salai” (1480-1524), pintor y alumno preferido de Da Vinci, para el que modeló en otros cuadros, como “El Ángel encarnado”, “Sant'Anna” y “San Juan Bautista”.
“Gracias al sabio uso de las fuentes históricas y a los resultados de las tecnologías de investigación modernas a disposición fue posible llegar a un resultado con bases sólidas y objetivas”, declaró el experto.
Recordó que durante decenios fueron formuladas muchas teorías sobre el célebre cuadro de Leonardo. Se hablaba del uso de un modelo masculino, pero también de retratos de mujeres de la nobleza, desde la propia Gherardini, hasta Pacífica Brandano, Caterina Sforza o Isabel de Aragón, entre otras.
“Había quien sostenía que el modelo había sido su alumno predilecto, el Salai, otros decían que la Gioconda era un autorretrato y algunos más sugerían que se trataba de una construcción imaginaria e idealizada”, señaló.
Ahora, destacó, son diversas las fuentes históricas que avalan la tesis de que Lisa Gherardini fue la primera modelo que posó para el cuadro, aunque permanecía un halo de misterio e incertidumbre.
Dijo que gracias a la disponibilidad de la primera de las estratificaciones surgidas en el análisis con rayos infrarrojos -realizado hace algunos años- en la Gioconda del Louvre se puede dar una respuesta sólida, que confirma la versión dada por el pintor Giorgio Vasari en su tratado de 1550 sobre pintores italianos.
En ese texto Vasari (1511-1574) escribió que fue Lisa Gherardini la modelo de Da Vinci y que al momento de posar estaba triste y melancólica, por lo que su marido, el Giocondo, mandó llamar juglares y payasos para que la hicieran reir mientras era retratada por el maestro.
Sobre la versión de que “El Salai” posó también para el cuadro, Vicenti dijo que existen documentos históricos indirectos que lo confirman.
Sin embargo, precisó que solamente gracias a la aplicación del Photoshop avanzado fue posible realizar una cuidadosa sobreposición de algunos detalles entre la Gioconda del Louvre y otras pinturas en las que Caprotti fue modelo de Leonardo.
En particular fue usado el “San Juan Bautista” y se encontró una “impresionante” correspondencia entre la figura de la nariz y la frente de esa pintura con la Gioconda.
Asimismo, fueron detectadas similitudes entre la sonrisa de la Gioconda y las otras presentes en los cuadros para los que “El Salai” posó.
“Gracias a tales pruebas técnicas se puede sostener con fuertes bases objetivas que además de Gherardini, Leonardo se avaló de ‘El Salai' como modelo para el cuadro”, concluyó Vicenti.
Muerto en circunstancias poco claras en 1524 (algunos dicen que fue asesinado), “El Salai” mantuvo una relación privilegiada con Leonardo y hay versiones de que fue su amante.