Discute con su novia, se mata de un tiro en la cabeza

Saltillo.- Carlos Eduardo es el nombre del adolescente que ya forma parte de las estadísticas de suicidios en la región que han tomado el camino fácil debido a un problema sentimental.

Los datos no son aún precisos pero según autoridades que llegaron primero al lugar de los hechos y se entrevistaron con varias personas, señalan que el joven utilizó un arma que está a nombre de un elemento de la Policía Federal, sin embargo, esos datos serán confirmados por el ministerio público.

Los hechos ocurrieron en el domicilio antes señalado cerca de las once y media de este miércoles donde al parecer el joven llegó a la casa y platicó con algunas personas que estaban en el interior confirmando que había tenido una pelea con su novia y sin decir más subió a su cuarto tomó el arma y jaló del percutor  enfrente de su madre de nombre María Teresa Solís Chávez quién al parecer ocupaba un cargo público en el estado de Nuevo León.

Sin esperar ni siquiera aquel cuerpo cayera al piso la madre en compañía de otras personas subieron a Carlos Eduardo aún automóvil tipo Audi con placas del estado de México  996 YMW, para llevarlo de urgencia a la clínica del Magisterio ubicada en Abasolo y LEA al sur de Saltillo.

Quizá fue la preocupación de la madre de pensar que podría salvar a su hijo o tal vez el joven aún iba con vida a bordo de la camioneta, sin embargo, al llegar a la sala de urgencias los médicos en turno sólo lo recibieron para confirmar que ya no presentaba signos vitales por lo que ahora ya era requerida la presencia de agentes del ministerio público para que tomarán parte de los hechos ocurridos.

Debido a qué se dio aviso ante el sistema de emergencias de la muerte de una persona con arma de fuego, las diferentes corporaciones estuvieron alerta, policía estatal, Policía Municipal y el grupo operativo GROM, mantuvieron unidades tanto en la clínica del magisterio como en la dirección particular del joven que se quitó la vida.

Finalmente los peritos del MP acudieron al magisterio para realizar las primeras indagaciones así como otro grupo en el hogar para realizar las preguntas a los que estuvieron presentes y tratar de resolver el caso y confirmar los motivos de la muerte del menor.