Critican papel de Ashton Kutcher en la cinta Jobs
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Steve Wozniak, amigo y cofundador de Apple que concibió la empresa junto a Jobs en 1976, dijo que la película no lo deja bien parado ni a él ni a los otros amigos del empresario, y que "Kutcher ama a un hombre que no conoció"
Sabido es el rédito que le genera a los actores de Hollywood el hecho de someterse a sacrificados cambios físicos, especialmente dietas, a la hora de interpretar algunos de sus personajes más exigentes. Algunos de los ejemplos más recordados son Christian Bale en El maquinista, donde llevó una dieta consistente en una manzana y un café diarios, los 16 kilos que aumentó Edward Norton para su papel en American History X y el aumento de peso de George Clooney en Syriana.
Casi por regla general, este esfuerzo se ve recompensado con premios o bien con el reconocimiento de la crítica.
Bien lo sabe esto Ashton Kutcher, que actualmente se encuentra presentando la biopic Jobs, el papel más exigente en lo que va de su carrera, para el cual, en su afán de parecerse al cofundador de Apple fallecido en 2011, llevó durante meses una dieta a base de frutas -la misma de Steve Jobs- con la que bajó ocho kilos y llegó a quedar internado por precaución.
Esta dedicación extrema por parte de Kutcher, sin embargo, tuvo un primer eco negativo. La crítica vino nada menos que de parte de Steve Wozniak, amigo y cofundador de Apple que concibió la empresa junto a Jobs en 1976.
"Me enteré de que lloró cuando Steve murió, eso prueba que es un fan, y eso se refleja en la pantalla. Ahora dice que yo critico su película porque estoy siendo consultor de otra, de la competencia, y eso demuestra que todavía está dentro de la piel de su personaje", dijo Wozniak, quien, por otra parte, reconoció negarse a ser asesor de Jobs "porque el guión ya estaba escrito y no me gustó".
La gran crítica de Wozniak se refiere a que la película no lo deja bien parado ni a él ni a los otros amigos del empresario y que Kutcher "ama a un hombre que no conoció".
Actualmente, Wozniak, quien asegura que Jobs nunca escribió códigos de programación ni hizo diseños originales, es consultor de Aaron Sorkin en otra película que se está preparando sobre Apple y que será una suerte de cara B de la de Kutcher.