Ordenó la Iglesia de Holanda castrar a menores por homosexualidad

Internacional
/ 29 septiembre 2015

    Según el "NRC Handelsblad", existen evidencias de al menos diez casos de castración de menores presuntamente con problemas psquiátricos.

    Amsterdam, Holanda.- La Iglesia catolica holandesa ordenó supuestamente en los años 50 castrar a diez menores con el objetivo de "ayudarles" a superar su "comportamiento homosexual", según una investigación periodística realizada por el rotativo holandés "NRC Handelsblad", cuyos resultados se publican hoy en el rotativo.

    Se trataba de reprimir, mediante la castración quirúrgica de los genitales, los "impulsos homosexuales" de cerca de una decena de niños internados en centros religiosos católicos, según especifica hoy el periódico holandés, que publica la información en exclusiva en sus versiones de papel e Internet.

    La investigación, realizada en base a testimonios de víctimas de abusos sexuales por parte de eclesiásticos en Holanda, concluye que entre los casos investigados se encuentra el de un menor que sufrió abusos sexuales por parte de sacerdotes católicos en un centro psiquiátrico, y que después fue castrado.

    El periódico holandés indica que supuestamente habría otros diez casos más de abusos y subsiguientes castraciones.

    Las primeras reacciones al duro artículo no tardaron en llegar. El Parlamento holandés pidió hoy que se haga "toda la luz" sobre esos casos y que se investigue a fondo si los hechos realmente ocurrieron tal como los expone el rotativo.

    La diputada del Partido Laborista (Pvda, en la oposición) Khadija Arib informó hoy de que se está organizando para la semana que viene una audiencia parlamentaria especial con los responsables de la última investigación realizada en Holanda sobre abusos a menores en el seno de la Iglesia, en concreto con su ponente, Wim Deetman.

    La idea del Pvda, apoyada por otros partidos del Parlamento, según explicó Arib, es celebrar -como tarde en un par de semanas- un debate en el pleno del Parlamento para que se den "todas las explicaciones" pertinentes, informa el periódico "De Volkskrant" online.

    Por otro lado, el diputado del partido ecologista Groenlinks Tofik Dibi, también en la oposición, aseguró hoy mediante un tweet que las informaciones desveladas por el "NRC Handelsblad" ponen en evidencia, si se confirman, que la investigación sobre abusos a menores en la Iglesia holandesa no ha sido eficaz.

    Según el "NRC Handelsblad", existen evidencias de al menos diez casos de castración de menores presuntamente con problemas psquiátricos quienes también habrían sido víctimas de abusos previamente.

    Una comisión especial creada para investigar los casos de presuntos abusos sexuales a menores en el seno de la Iglesia holandesa, la "Comisión Deetman", no hizo referencia alguna a esos casos de castración, indica el diario.

    La castración se practicó presuntamente sobre los diez menores que estaban internados bajo la custodia de la Iglesia católica en centros psiquiátricos distribuidos por varias provincias de Holanda, agrega el "NRC Handelsblad".

    Aún más grave, según denuncia el rotativo, es que las intervenciones quirúrgicas se justificaron como un "acto de ayuda, para liberar" a los menores de su supuesta "enfermedad": la homosexualidad.

    Algunos niños internados en los centros religiosos analizados en el estudio y que se atrevieron a denunciar los abusos sexuales cometidos contra sus compañeros al parecer también fueron sometidos a castración como "castigo", agrega el diario.

    Entre las pruebas analizadas por el rotativo figuran expedientes médicos, cartas privadas y notificaciones de abogados.

    Aunque la "Comisión Deetman" fue informada de la sospecha de que existían varios casos de castración como "medida terapeútica para la corrección de la homosexualidad", finalmente se decidió no incluir esa información en el informe definitivo que se publicó el año pasado.

    El periódico holandés señala entre otros casos, el de Henk Heithuis, menor de edad en 1956, quien en ese año fue castrado, según su propia versión, tras sufrir abusos en un internado católico en la localidad holandesa de Harreveld, en la provincia de Gelderland.

    Heithuis fue víctima de abusos sexuales por parte de sacerdotes católicos y poco después sometido a una operación de castración de los genitales por recomendación expresa de la dirección de ese internado para intentar "corregir su homosexualidad".

    La oposición en el Parlamento holandés, encabezada por el Pvda, el liberal de izquierdas D66 y los ecologistas de Groenlinks (izquierda verde), expresó hace ya semanas sus dudas acerca de la profundidad y el detalle en la investigación de abusos sexuales en el seno de la Iglesia católica holandesa.

    Los abusos a los cuales se refiere el "NRC Handelsblad" ya fueron denunciados a la "comisión Deetman" en 2010, aunque tras finalizar sus trabajos en diciembre de 2011, la comisión decidió no incluir las denuncias por castración, supuestamente por falta de "pruebas concluyentes".

    El informe de la "Comisión Deetman" especificó que "entre 10,000 y 20,000" menores fueron víctimas a partir de 1945 de abusos sexuales por parte de miembros de la Iglesia católica en Holanda, una práctica que era conocida por la jerarquía eclesiástica, cuya mayor preocupación era evitar el escándalo.

    El pasado 15 de febrero, el Gobierno conservador holandés pidió que se abriera una nueva investigación sobre abusos en la Iglesia católica, aunque sólo centrada en niñas y mujeres presuntas víctimas de abusos.


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