Reclaman grupos apoyo a la Tribu Yaqui por el problema del agua
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El presidente de Amigos del rio San Rodrigo, Waldo Terry Carrillo, dijo que se han sumado a la caravana nacional en solidaridad con la Tribu Yaqui de Sonora en sus reclamos por el derecho al agua, porque el agua y la vida están íntimamente ligadas
Piedras Negras, Coah. Organizaciones ambientalistas al igual que organismos sindicales, iniciaron en Piedras Negras, Coahuila la Caravana Nacional por la Defensa del Agua, el Territorio, el Trabajo y la Vida, en apoyo a la tribu Yaqui de Sonora, al hacer un reclamo al gobierno federal por el impacto en la explotación de los acuíferos.
El presidente de Amigos del rio San Rodrigo, Waldo Terry Carrillo, dijo que se han sumado a la caravana nacional en solidaridad con la Tribu Yaqui de Sonora en sus reclamos por el derecho al agua, porque el agua y la vida están íntimamente ligadas.
A este pueblo se le ha despojado de su derecho al agua con la construcción del Acueducto Independencia que le extrae arbitrariamente -porque fue sin consultar a los usuarios originales- 60 millones de metros cúbicos de agua al río Yaqui para favorecer a la ciudad de Hermosillo. Los líderes que reclamaron estos hechos, Mario Luna Romero y Fernando Jiménez Gutiérrez, están presos, afirmó.
Acompañado por integrantes de la Coordinadora Nacional de la Educación y del sindicato Mexicano de Electricistas, el ambientalista hizo referencia al rio San Rodrigo, un afluente del rio Bravo, el que al paso de los años se le ha destruido el ecosistema por la extracción de material petreo para la construcción.
Los reclamos sociales por sus impactos se inician en los años noventa del mismo siglo. En ese periodo de más de un cuarto de siglo se ha constatado que no existe autoridad capaz de detener la inexorable destrucción de los recursos naturales renovables y no renovables, la pérdida de biodiversidad, desaparición de especies animales y vegetales propias de la región, contaminación del agua y amputación de los acuíferos, con graves daños ambientales y sociales, subrayó.
Destacó que el daño es tal que se ha llegado a un estado de no retorno a su situación original, es decir, los daños son irreversibles, independientemente de que las actividades causantes del daño cesaran en este mismo momento.
Añadió que durante un cuarto de siglo se han visto pasar funcionarios públicos y políticos de los tres niveles de gobierno y de distintas dependencias que fueron informados de la situación del río San Rodrigo pero que no se preocuparon ni se esforzaron por hacer respetar el estado derecho de la sociedad ni por encontrar soluciones donde todos ganaran.