Se solidariza la FSM-América con la Sección 50 del Sindicato de Trabajadores del petróleo en Tabasco
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En reunión con integrantes de la FSCISP tabasqueña reitera también su solidaridad con el SME
El Movimiento Obrerista Petrolero de Evolución Democrática (MOPED), que desafía las imposiciones de la dirección en la Sección 50 del Sindicato de Trabajadores del Petróleo Mexicanos, cuenta ya con el apoyo de la Federación Sindical Mundial (FSM).
Así lo refirió en un comunicado la Central Unitaria de los Trabajadores de México (CUT), que en voz de su Secretario General, Luis Alfonso Vargas Silva, acompañó al representante de la FSM en América, el cubano Ramón Cardona, para participar en encuentro convocado por el MOPED en la Casa de la Cultura del Municipio de Paraíso, en el estado de Tabasco.
Los trabajadores que integran el MOPED aseguran influir en el ochenta por ciento de los dos mil cuatrocientos integrantes de la Sección 50 del Sindicato Petrolero Mexicano, pese a represalias y agresiones de que enlistaron haber sido objeto por oponerse a los métodos autoritarios de la dirección sindical "oficialista".
En dicho encuentro fue valorada la situación de los trabajadores petroleros y la falta de respaldo para la solución de las demandas que alientan la lucha del MOPED, afanada en "recuperar el respeto alos derechos laborales, los valores y la dignidad de los trabajadores de la Sección 50 del STPRM reclamando que el sindicato desarrolle la defensa de la industria petrolera".
El Secretario de la FSM para las Américas transmitió su solidaridad y apoyo en la defensa del contenido de los Estatutos que rigen la actividad del Sindicato Petrolero Mexicano y el contenido del Convenio que establece las relaciones laborales, evidenciando la voluntad de resistencia de los trabajadores mexicanos ante la imposición de un modelo sindical antidemocrático y corporativo ajeno a los intereses de los trabajadores que se supone deba representar, asegurándoles que en esa batalla no están solitarios. Ramon Cardona resaltó que luchan no tan solo por sí mismos, "sino por todo el movimiento sindical mexicano dondequiera sea sometido a las prácticas de sindicalismo corrupto".
Por su parte el secretario de la CUT, Luis Alfonso Vargas, expuso las nefasta consecuencias que la aprobación de la Reforma Laboral que el PAN impulsa en el Congreso provocaría en los trabajadores, mientras que el ingeniero Alfredo Hernández Peñalosa, miembro del Comité Nacional de Estudios de la Energía e integrante de la dirección del Frente Sindical, Campesino, Indígena, Social y Popular de Tabasco, alertó acerca de las prácticas que se aplican en la explotación petrolera en detrimento de la preservación de este importante recurso natural mexicano y de las violaciones a las necesarias condiciones de trabajo que en la activad laboral en el sector exige.Â
Tras un rico intercambio de pareceres acerca de la realidad laboral y sindical mexicana y tabasqueña, realizazdo en el local del Sindicato Telefónico, se realizaron también encuentros con dirigentes sindicales en el estado de Quintana Roo promovido por el respetado dirigente sindical Salvador Ramos Bustamante de donde surgieron importantes iniciativas a favor de acrecentar la acción del movimiento sindical mexicano clasista y en Xalapa, Veracruz, auspiciado por la Unión Democrática de ese Estado en el que fueron expuestos criterios acerca de la situación laboral y sindical mexicana y la necesidad de la unidad en la acción para elevar la capacidad de reacción ante las amenazas y agresiones de que los trabajadores son objeto.
Otras reuniones relevamtes fueron realizadas además en el distrito Federal con representantes de las direcciones de Partidos Políticos de Izquierda y líderes obreros como la Maestra Marcela Lombardo, Darío Rojas, Agustín Castillo del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Mexico (STUNAM), así como con dirigentes del Sindicato de la Aviación y con el Secretario General del SME, Martin Esparza.
Fueron éstas y otras organizaciones sindicales las que encabezadas por la CUT las que hiciron posible el extenso programa de visitas por más de veinte estados mexicanos que las mismas evaluaron como "un hito en el impulso del movimiento sindical mexicano".