2 de octubre no se olv…
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Hoy es 2 de Octubre, fecha insoslayable en la memoria colecti… ¿Qué? ¡Cómo que fue ayer!
¡Perdón, se me olvidó!
La conmemoración de los trágicos eventos de 1968 en Tlatelolco es, dentro del calendario cívico nacional, una curiosa efeméride o incómoda por decir lo menos.
No sé, al día de hoy, qué versión estén dando de estos acontecimientos en la enseñanza pública (mis hijos, a diferencia de los de usted, no asisten a la escuela, tienen cola, comen croquetas y son divertidos y adorables todo el tiempo). Pero es difícil suponer que se esté ofreciendo una visión crítica de aquellos hechos en los que el Estado juega un papel represor y genocida.
¿Cómo se le explica a un alumno que el mismo Gobierno, que construyó la escuela y le paga su sueldo a la profe, ordenó asesinar a una cantidad jamás precisada de estudiantes?
“Sí, niños, estudiantes como ustedes, y no se crean que mucho más grandes de lo que son ahora, eh”.
Administraciones van y administraciones vienen, presidentes ascienden y presidentes caen, pero el Gobierno es esencialmente la misma entidad, la misma institución desde su fundación hace dos siglos.
De manera que veo difícil que un Gobierno les inculque a sus hijos y futuros ciudadanos un resentimiento contra sí mismo. Pero si usted conoce mejor el enfoque que la educación oficial le da a este oscuro episodio de la Historia, por favor hágamelo saber.
El Gobierno no ha podido hacer con el 2 de Octubre la misma espectacular maroma que logró ejecutar con la Revolución Mexicana. Aquella gesta, que fue un levantamiento contra el Gobierno y sus tiranías de orden social y antidemocrático, se convirtió en estandarte del propio Gobierno.
Es más, tan chingón el Gobierno de México que institucionalizó la Revolución (lo que equivale a lograr que una turba iracunda haga una sola fila y se anoten todos en el libro de visitas) y la transformó partido. Y no se crea que cualquier partido, sino el partidazo oficial (que ojalá Patitas de Cabra me le dé pronto buen morir y nadie encuentre nunca su cadáver).
No se había visto en política nada tan espectacular desde que Roma, luego de crucificar a Diosito, se convirtió en la sede del poder católico y papal. ¿Usted lo entiende? Yo tampoco. ¡Ese era el PRI! Pero por increíble que parezca fue más sencillo hacérselo a Cristo mártir que a los mártires de la Plaza de las Tres Culturas.
El 2 de Octubre es la Navidad de los Chairos, en la que todos intercambian regalos y se expresan sus mejores deseos de ver derrocado al régimen opresor. Los intelectuales de izquierda se ufanan de haber estado siempre del lado del movimiento y los más románticos hasta se ponen playeras del Che y salen a gritar consignas.
Pero como que se está perdiendo el verdadero significado de la celebración y ésta ya no es lo que solía ser. Sobre todo cuando la “izquierda” está ahora en el Poder.
Lo cierto es que desde siempre la fecha ha servido como pretexto para que grupos no identificados de manifestantes hagan desmanes por doquier al amparo del aniversario de la masacre, porque “¡que feo sería que el Estado nos reprimiera con el uso de la fuerza pública, precisamente en este día en que se conmemora el uso arbitrario y sanguinario de dicha fuerza!”.
Y como ningún gobierno quiere que le llamen Díaz Ordaz (porque ¡ah qué feo estaba ese cabrón!), pues autoridades locales y federales se hacen soberanamente pendejas y prefieren asumir el costo de la destrucción (el costo político, porque la destrucción de la propiedad privada la paga cada pobre damnificado) antes que asumir el papel del Diablo de la Pastorela, es decir, hacerla de Estado represor en el mero 2 de Octubre.
¿Quiénes son esos que en cada aniversario de la Matanza de Tlatelolco salen en simiesca horda a asaltar un Oxxo, a destruir un McDonalds, a quemar una librería?
¿Son verdaderos estudiantes dando rienda suelta a sus más genuinos sentimientos de inconformidad y deseos anarquistas?
¿Son grupos radicales que buscan derrocar al régimen opresor… que ya fue derrocado en las urnas por la vía democrática?
¿Son reventadores pagados por el propio Gobierno para desacreditar para siempre la memoria del Movimiento del 68?
¿Son Lopezobradoristas que no se enteraron de que AMLO ya es Presidente o simplemente les quedó la mano sabrosa para hacerla de jamón por todo?
¿Es la extrema derecha, la mafia del poder, la “derechairiza”, la cúpula neoliberal desprestigiando al pensamiento de izquierda?
¡Nunca nos lo dicen! Simplemente nos informan que hubo revueltas, desmanes y daños –en el mejor de los casos– materiales.
Pero en un País como el nuestro, con tan buenos servicios de inteligencia, con excelente periodismo de investigación, nunca sabemos quiénes son, qué quieren o de dónde vienen. ¡Qué raro! ¿No cree?
Y para los más jóvenes, mis amigos millennials, que ya están haciendo de los 43 de Ayotzinapa una nueva camiseta para salir cada año a hacer la consabida marcha con el respectivo pronunciamiento guerrillero en redes sociales, les deseo mejor suerte ya que los manifestantes del 68 no han podido, en medio siglo, convertir su fecha cabalística en día feriado para beneficio de todos los hijos de esta Patria olvidadiza.
petatiux@hotmail.com
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