Optimismo en las alturas
COMPARTIR
TEMAS
SEGUNDA PARTE
El finado Dr. Argelio Santos –fundador del Ginequito– me explicó una vez cuál era la diferencia entre un ginecólogo ingenuo y otro aguzado. El segundo siempre que atiende a una paciente se asegura de que esté presente una enfermera y a esto le llamaba “testigo de calidad”.
El primero no lo hace y se arriesga a que sea acusado de mal trato o negligencia y en caso de una controversia, siempre será su palabra contra la de la paciente.
Les platico: siguiendo su consejo, procuro tener un “testigo de calidad” cuando me toca tratar algún asunto delicado o al reunirme con personajes de cierto calado.
A mi desayuno del lunes pasado con Carlos Salazar Lomelín –a la sazón presidente del Consejo Coordinador Empresarial, CCE– invité a un capitán de industria de gran prestigio reconocido dentro y fuera de México, de la vieja guardia, de esos que empezaron desde abajo y no de las segundas o terceras generaciones que quieren que el maná les caiga del cielo, peladito y en la boca.
Y no sólo fue mi “testigo de calidad”, sino que al final cuestionó al dirigente empresarial su cercanía con el presidente y con los entretelones del poder de la 4T, mientras que millones de pymes y de todos los tamaños, claman por representatividad por parte de las cámaras empresariales y critican su rol tan cercano con oligopolios como el de Carlos Slim.
Respetuoso del compromiso que hice ante el presidente del CCE, voy a narrar aquí solamente los temas que tratamos en ese desayuno y que a los dos días él abordó abiertamente en la reunión a la que –como dije ayer– asistieron 65 personas entre políticos, empresarios, gente de organizaciones civiles y uno que otro periodista camuflado, además de los colados que siempre hay.
Lo que dijo el lunes y que NO tocó en la reunión del miércoles, NO lo voy a mencionar y pongo como “testigo de calidad” al capitán de industria que estuvo presente en ese desayuno del machacado sin cebolla.
Y antes de darle, como me lo pidieron 789 personas que atendieron la consulta que les hice en mi artículo de ayer –y yo que creía que eran nomás tres– les recuerdo que nunca grabo mis conversaciones ni entrevistas y consecuentemente, todo lo que van a leer en seguida es el producto de los apuntes que escribí en mi libreta media hora después en el estacionamiento del lugar donde se dio el desayuno.
Va: “Hoy AMLO (Plácido y muchos empresarios le decimos MALO) tiene poder, pero no tiene gobierno, no tiene estructura.
El presidente le ha regresado la esperanza a los mexicanos. ¿Por qué ganó? Por su ataque frontal a la corrupción y si en este sexenio la economía NO crece pero se acaba la corrupción, con eso México sale ganando.
La idea de que a la economía mexicana le está yendo mal es un tema de percepción.
Yo, si veo un problema busco una solución. Por ejemplo, es verdad que los recortes de presupuesto le han restado margen de maniobra al gobierno en temas importantes.
A mí los empresarios mexicanos me apoyan en mis gestiones como presidente del CCE y representante de la IP en las relaciones con el gobierno.
Y ante esto, me ha tocado pasar la charola a grupos empresariales como Cemex y a empresarios como Armando Garza Sada y Carlos Slim para realizar los estudios que hay detrás de los proyectos de infraestructura anunciados en Palacio Nacional, y todos han apoyado económicamente.
Si analizamos que la deuda de México es el 45 por ciento del PIB (y vemos las proporciones que tienen EU, Japón, Alemania y otros países desarrollados) creo que no deberíamos tenerle miedo a subir la nuestra unos 20 puntos porcentuales. Eso se lo he dicho a los funcionarios del gobierno que les toca dicho tema.
Y sobre eso, un día, Lorenzo Zambrano me dijo que Cemex debía 24 mil millones de dólares y a mí me quitaba el sueño la de 3 mil 500 millones de dólares que teníamos en Femsa. Entonces Lorenzo me explicó que Cemex tenía un problema de liquidez, más no de solvencia
Le he hecho ver a AMLO su tendencia a la confrontación y que eso no abona en nada para crear un ambiente de confianza, y él me respondió: Ese es el sello de la casa.
Creo que se han exagerado las críticas en contra de las reformas que está implementando su gobierno. Personalmente yo estoy de acuerdo con el presidente.
¿Qué es lo que realmente nos estaba sucediendo en México? No volteábamos a ver los problemas sociales del País. Cuando me invitan a hablar ante egresados de universidades nacionales y extranjeras les digo: Qué bueno que ustedes tienen oportunidad de viajar por tantos países y saben lo que pasa en los mercados del mundo, pero que lástima que no conocen el Zócalo.
En su vida han caminado por esa plancha ni han visto el sincretismo de éste País. Las diferencias sociales, la pobreza, la falta de oportunidades, las protestas diarias, con y sin razón que van y le mientan la madre a quien quieras ahí alrededor.
Esto ha pasado antes, mucho antes y sigue pasando el día de hoy.”
Más temas trató el líder empresarial en el desayuno del machacado sin cebolla y los repitió en su conferencia dos días después, pero de eso me ocuparé mañana y a lo mejor también pasado mañana…
CAJÓN DE SASTRE
“Le sigues, porque seguramente traes todavía un buen arsenal”, dice la irreverente de mi Gaby y yo le respondo: Facilito que soy como la Singer, así será.
placido.garza@gmail.com
