El bautizo de Benjamín
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Bienvenido, Benjamín, al mundo de los técnicos campeones. Creo que la Final entre Santos y Monterrey fue un muy buen espectáculo, digno del futbol mexicano. En el partido de ida, el Santos planteó y jugó justo como se debe disputar este tipo de partidos. Ahí están como ejemplos, el Real Madrid y el Bayern Munich, víctimas de un Chelsea que fue muy inteligente y que supo conseguir sus objetivos.
El Santos estuvo tan concentrado como el Chelsea en la Champions. Si el resultado de 1-1 en el duelo de ida fue injusto es porque el Monterrey tuvo fortuna de conseguir ese gol en los últimos momentos, para dejar la moneda en el aire y el suspenso por saber quién ganaría el partido de vuelta. Pero con la diferencia, claro, de que el Santos jugaba en casa.
Torreón ha sido el lugar que sirvió de testigo para la consecución de la cuarta estrella de estos Guerreros. El ambiente estaba servido para que los de La Comarca rompieran con la llamada "maldición del superlíder", pues desde 2007, un líder de la tabla general no se coronaba en el futbol mexicano. Curiosamente, los últimos en conseguirlo fueron los Tuzos. Qué cosas.
El planteamiento fue fantástico por parte de Benjamín Galindo, pero también la aplicación de los Guerreros en el terreno de juego. Se notaba que no querían dejar escapar la oportunidad, como sucedió en esas cuatro Finales consecutivas que había perdido el Santos. Así lo dijo Benjamín: "Ya nos tocaba".
Monterrey ha sido un digno rival, porque no dejó de luchar en ningún momento. A pesar de tener el marcador en contra, en uno de los estadios más complicados de México, los Rayados insistieron de manera heroica, pero no les fue suficiente para empatar y forzar los tiempos extra. Les faltó muy poquito para conseguir el milagro. Pero es plausible la entrega, el esfuerzo de todos los jugadores, dentro y fuera de la cancha.
Vucetich probó por primera vez el sabor de la amargura de perder una Final, ya que estaba invicto en 12 Finales, incluidas cinco en Primera División, dos en Liga de Ascenso, dos Copas, una Interliga y dos de Concachampions. Es admirable lo que ha hecho Vucetich, pero también lo que hicieron Benjamín Galindo y sus pupilos para concluir una temporada de manera perfecta.
Toda la gente de La Comarca ha disfrutado intensamente este título, ya que los vuelve a colocar en lo más alto del nivel futbolístico en México y el continente americano.
Qué pena que el futbol mexicano no se pueda ver en Europa (por falta de un convenio), porque sería una manera de promocionar tanto a futbolistas como a entrenadores mexicanos, que podrían exportarse en mayor cantidad.
Si esta Final se hubiera visto en más países, estoy convencido que muchos de los jugadores que disputaron ese espectacular partido podrían ser contratados por diferentes equipos en el mundo.
Ojalá se puedan hacer esas gestiones para que en otros países futboleros se pueda ver el balompié mexicano. El futbol de España, porejemplo, se ve prácticamente en todo el mundo, porque hay buen nivel y buenos convenios.
En México vemos futbol de muchos países. ¿Por qué el futbol mexicano no se ve en Europa? Me encantaría que tanto las televisoras como la Federación Mexicana hicieran las gestiones necesarias para que así se promocionara más al futbol mexicano. Necesitamos más jugadores nacionales fuera de México para poder crecer más.
Ya lo dije anteriormente. Hay que aprender de Brasil, Argentina, Colombia, Uruguay, Paraguay, Chile y Perú, que tienen muchísimos más jugadores en el extranjero, y de esa manera, el nivel de la Selección Nacional mejorará.
De regreso a la gran Final, felicito a los flamantes campeones. Se lo merecen, no por esta Final de ida y vuelta, sino por todo el campeonato que desarrollaron. Puede ser que luchen por el bicampeonato. Estoy seguro de ello.
Pero para conseguirlo tendrán más dificultades. Parece fácil, pero no lo es. De eso se darán cuenta la próxima temporada, ya que el Pachuca se los pondrá muy complicado.
¡Que te lo digo yo!