Roberto Armocida: ‘La muerte no es lo peor’
Armocida realizará un recorrido visual a lo largo de su carrera como fotógrafo, cazador de los momentos en los que la humanidad se exhibe a flor de piel y el extenso culto a la Santa Muerte en la Ciudad de México
“Vivió siempre creyendo saber la fecha exacta. Besó en el último segundo la frente de su esposa y sonrió esperando que sus pulmones se sellaran tras una vida dichosa, sin un momento desperdiciado. Cuando el reloj pasó la hora marcada, el seguía vivo y por primera vez sintió verdadero miedo’’, tomado de Internet.
Entre el 26 y el 28 de octubre se llevará a cabo el VI Coloquio Internacional del Día de Muertos, mismo que organizado por la Escuela de Artes Plásticas ‘Rubén Herrera’, dará muestras sobre las distintas visiones que se pueden obtener del único aspecto que con certeza nos aborda a todos: la muerte.
Entre las diversas disciplinas que aborda el coloquio se encuentra la del fotógrafo italiano Roberto Armocida, colaborador de VANGUARDIA desde hace aproximadamente 6 meses y con experiencia en la rama de alrededor de 30 años.
“Yo no soy ningún experto de la muerte, quisiera ser un experto de vida pero obviamente en esta ocasión creo que mi experiencia como fotógrafo y como persona que ha recorrido varias ocasiones entre la vida y la muerte, lo que voy a aportar es mi punto de vista”, señaló Armocida.
El fotógrafo estudió en el Liceo de Bellas Artes de Roma, en Italia, especializándose en artes gráficas y arquitectura e iniciando así un recorrido fotográfico como colaborador en prensa y agencias de información como Ansa y Reuters, así como diversos medios mexicanos como El Universal.
Más adelante estuvo un periodo en Centroamérica, durante el cual cubrió acontecimientos como el desenlace bélico del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional en El Salvador, la invasión de Estados Unidos en Panamá, el sufrimiento de la guerra en Honduras y Costa Rica, entre otros conflictos.
“Sobre la muerte y otras calamidades’ - como tituló su charla - busca dejar un mínimo margen de reflexión; la muerte es algo definitivo y no se necesita mucha ciencia para comentarlo, pero en mi modesta opinión la muerte no es lo peor que nos puede suceder en esta vida, eso es algo que a lo largo de estos años de carrera lo he podido comprobar ampliamente”, aseguró el fotógrafo.
En su conferencia, dará muestra de su carrera como fotógrafo y relatará anécdotas y reflexiones sobre sus distintos trabajos, entre ellos un fotorreportaje en el que captura aspectos de tres de los cultos más importantes en la Ciudad de México.
“Es un trabajo muy amplio sobre las condiciones de las creencias en el D.F. y en general de la idiosincrasia mexicana, tocando tres capítulos fundamentales que fueron la Santa Muerte, la Virgen de Guadalupe y San Judas, elementos que en la capital alcanzan niveles de popularidad y participación masivos que me han impactado”, explicó.
Aseguró que dicha sorpresa se trata de un choque cultural, pues en su país la relación con la muerte es algo muy distinto a la que se vive en México tanto con la celebración del Día de Muertos como con la Santa Muerte.
“Nosotros los italianos lo consideramos como algo que no hay que tener cerca ni darle confianza, entre más lejos mejor; nosotros no tenemos las tradiciones de convivir con los muertos y menos platicar con ellos, quizá porque se trata de un país que constantemente ha sido invadido por la muerte en guerras, desgracias, invasiones, conflictos…”, aseguró.
Sin embargo asegura que sus estancias en México, la última desde hace cerca de 4 años y medio, le han permitido comprender y desarrollar interés por lo que sucede en nuestro país, y que a él mismo le tocó enfrentarse a situaciones muy cercanas a la muerte.
“En mis inicios tenía muchos miedos, entre ellos el temor a la muerte; en varias ocasiones me tocó vivirla muy de cerca y casi sentir ‘su caricia’, y que bueno que estoy aquí para contarlo pero chistosamente la desafié para combatir mis propios miedos”.
Cuatro años de pasar largas tardes por los barrios de Tepito, en los templos, conviviendo con sacerdotisas, nadando entre el olor de las hierbas de los rituales y la desarrollada iconografía alrededor de la Santa Muerte tuvieron como resultado una reflexión final propia.
“Aterricé sobre la Santa Muerte ver cómo en la imaginación colectiva, se le ama, se le odia, se le tiene miedo o se le ignora, pero es una presencia viva y constante en algunas partes de la República, es un culto bien establecido que algunos gobiernos e instituciones se rehúsan a reconocer y enfrentar, y eso mantiene mi atención”, dijo.
Aunque se ubica lejos de las naturalezas muertas y de vez en cuando le llama la atención algún paisaje, el verdadero lenguaje de Armocida radica en el fotoperiodismo y la fotografía documental centrado en los sentimientos humanos, la religión y culto, así como diversos acontecimientos sociológicos.
“Desafortunadamente es cierto, la verdad de los seres humanos se revela en la violencia y en el sufrimiento, entonces no es cuestión de ensañarse uno en esos aspectos pero lo profundo del ser humano se revela en situaciones de peligro o abatimiento, esto realmente en términos de investigación visual y percepción visual para mi son temas sumamente interesantes”, señaló.
Por último, aseguró tener una sorpresa para los asistentes a la conferencia inaugural: “a no ser que los mexicanos crean que son los únicos que dialogan con la muerte, pues hay otras culturas y lugares un poco impensables donde la muerte es incluso un elemento de acercamiento, de amistad”.
¡No te lo pierdas!
Conferencia de Roberto Armocida
Fecha: 26 de octubre
Lugar: Escuela de Artes Plásticas Rubén Herrera
Hora: 10:30 horas
Entrada libre
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