Destrucción ‘ecológica’ de material electoral
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El material fue triturado por mandato de ley en la empresa Kimberly Klark, de Ramos Arizpe.
La Junta Local Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral destruyó “de manera ecológica” 8 mil 374 kilos de material electoral utilizado en los pasados comicios para elegir diputados federales en Coahuila.
Ante los representantes de los partidos políticos, consejeros y autoridades del propio instituto, el material fue triturado por mandato de ley en la empresa Kimberly Klark, de Ramos Arizpe.
La destrucción del material siguió los “Lineamientos para la Destrucción de los Votos Válidos, Votos Nulos, Boletas Sobrantes y otra Documentación del Proceso Electoral Federal 2014–2015”.
José Luis Vázquez López, vocal ejecutivo de la Junta Local del INE en Coahuila detalló que los documentos que se destruyeron fueron la lista nominal de electores, actas de la jornada electoral y actas de escrutinio y cómputo de casilla de diputados federales de mayoría relativa.
También actas de escrutinio y cómputo de casilla especial diputados federales de mayoría relativa y actas de escrutinio y cómputo de casilla especial diputados federales de representación proporcional.
Precisó que también se incluyeron los cuadernillos para operaciones de escrutinio y cómputo de diputados federales para casillas básicas, contiguas y extraordinarias y los cuadernillos para operaciones de escrutinio y cómputo de diputados federales para casillas especiales.
Otra papelería destruida fue lo referente a las actas de electores en tránsito para casillas especiales, hojas de incidentes, constancias de clausura de casilla y remisión del paquete electoral al consejo distrital, y escritos de incidentes y protestas presentados en las casillas.
Vázquez López explicó que el organismo conservará material electoral de alrededor de mil 680 casillas que fueron seleccionadas previamente para estudios del mismo proceso electoral federal.
De igual forma, Vázquez López señaló que en el caso de Coahuila el procedimiento de destrucción se rigió bajo los estándares profesionales de reciclamiento, en el que se utilizaron todas las herramientas y mecanismos para salvaguardar el medio ambiente.
